Vaticano/China.- El Vaticano envía una delegación para retomar el diálogo con China

Actualizado: martes, 27 junio 2006 14:07

ROMA, 27 Jun. (de la corresponsal de EUROPA PRESS C. Giles) -

El Vaticano ha enviado una delegación de expertos diplomáticos a China para mantener algunos contactos con el Gobierno chino en un momento de tensión debido a las persecuciones que sufren los cristianos en el país y la ordenación sin el permiso del Papa de algunos obispos.

La noticia fue publicada hoy por algunos medios de comunicación chinos y confirmada por la agencia Asia News, que depende del Instituto Pontificio de Misiones en el Extranjero. La delegación está compuesta por monseñor Claudio Celli, considerado uno de los más expertos diplomáticos de la Santa Sede y el representante de la Secretaría de Estado, Gianfranco Rota Graziosi.

AsiaNews denuncia que en el último año las autoridades chinas han detenido a 1.958 cristianos evangélicos y que la "persecución más dura se realizó en Henan, donde se detuvo a 823 pastores y fieles cristianos".

Según la agencia, China insiste para retomar las negociaciones plenas con el Vaticano en que se rompan las relaciones con Taiwán y en la no intromisión en los asuntos internos de China, lo que comprendería las ordenaciones episcopales, dos condiciones que no están dispuestos a aceptar en el Vaticano.

Esta es la primera visita de una delegación de la Santa Sede en misión oficial desde el 2000 después de que las negociaciones se bloquearan tras las protestas en Beijing por la canonización de 120 mártires chinos por parte de la Santa Sede.

El pasado mes de mayo, el Vaticano con un comunicado oficial anunció la excomunión de los dos obispos chinos que fueron ordenados sin el permiso de la Santa Sede, así como los prelados que les consagraron y denunció que esto suponía una "grave violación de la libertad religiosa" que añadía nuevos obstáculos al diálogo entre la Santa Sede y Beijing.

En China, el Gobierno permite la práctica del catolicismo sólo a través de la Asociación Patriótica, un organismo controlado por el Ejecutivo y separado de la Santa Sede, con poder para el nombramiento de los obispos.

China suspendió sus relaciones con el Vaticano en 1951, poco después de que el Partido Comunista Chino tomase el poder en Beijing. El culto sólo está autorizado en iglesias controladas por el Gobierno, si bien millones de católicos chinos pertenecen a la denominada "iglesia clandestina".