Villepin admite que "la prioridad es salir de la crisis" tras una nueva movilización anti-CPE

Actualizado: martes, 4 abril 2006 20:45


PARIS, 4 Abr. (EUROPA PRESS/Javier Gómez Muñoz) -

El primer ministro, Dominique de Villepin, reconoció hoy en la Asamblea Nacional gala que "la prioridad" del Gobierno es "salir rápidamente de la crisis actual". Mientras el jefe del Gobierno proclamaba estas palabras, los sindicatos y las organizaciones estudiantiles dieron una nueva muestra de su capacidad de movilización al conseguir que cientos de miles de personas protestasen contra el Contrato Primer Empleo (CPE).

La asistencia a las 200 manifestaciones convocadas en toda Francia fue, según los sindicatos, "comparable" a la del pasado martes, cuando entre uno y tres millones de personas se sumaron a los cortejos. La CGT anunció a las 17:00 horas que la cifra total de manifestantes "superará los tres millones de personas".

El seguimiento de los paros convocados en el transporte y la Administración Pública fue, no obstante, menor que el pasado martes.

"Hay que llegar hasta el final. El Gobierno y los políticos están empezando a ceder. Esta jornada ya ha sido un éxito, al menos tan importante como la semana pasada", expresó François Chérèque, líder del sindicato CFDT, el segundo del país.

Es posible que la de hoy fuese la última gran movilización contra el CPE. Sindicatos y estudiantes, si se sientan a la mesa de negociación, buscarán otros medios de mantener la presión sobre el Gobierno, sin convocar nuevas manifestaciones o huelgas.

"La crisis no le interesa a nadie", declaró Villepin, quien recordó que el grupo parlamentario de la UMP es el responsable de "restablecer el diálogo" para conseguir una proposición de ley de consenso que permita "una buena solución" para corregir el CPE con las recomendaciones que prescribió el presidente, Jacques Chirac, el pasado viernes: reducción del periodo de prueba de dos años a un año y derecho a conocer el motivo del despido.

En este sentido, el presidente del grupo parlamentario de la UMP, Bernard Accoyer, confirmó que las negociaciones con sindicatos y estudiantes, que exigen la retirada del CPE, comenzarán mañana. "No habrá límites en la discusión. Todo puede ser abordado", dijo Accoyer.

Según el secretario general de la CGT, Bernard Thibault, la importante afluencia a estas manifestaciones puede suponer "un golpe fatal para el CPE". "Si hay una oportunidad de convencer a los parlamentarios del CPE de que están en un error, les pediremos la retirada del contrato. Pero no negociaremos ningún cambio", añadió.

Villepin negó que este diálogo sea un paso atrás de su Ejecutivo.

"El Gobierno no bajará los brazos, no se unirá a quienes quieren llevar al país por la vía del inmovilismo", dijo Villepin, quien soportó duras críticas en la sesión de control parlamentaria. El Partido Socialista denunció que "haya dos primeros ministros", el propio Villepin y el ministro del Interior, Nicolas Sarkozy. "Usted ya no gobierna", le espetó el portavoz socialista, Jean Marc Ayrault.

PAROS MENOS IMPORTANTES EN TRANSPORTE

Los usuarios vivieron hoy una jornada difícil en los transportes, pero no se ha conseguido el "martes negro" preconizado por los sindicatos. El transporte urbano funcionó con relativa normalidad en París, con un 25% menos de frecuencia de paso en los metros y anulaciones de entre el 25% y el 50% de los trenes de cercanías.

Otras 32 ciudades del país sufrieron perturbaciones en sus servicios de transporte público.

En el tráfico ferroviario, los problemas fueron semejantes a los del pasado martes. Los trenes regionales redujeron su circulación en un 50 por ciento, y los de alta velocidad, en un 25 por ciento. El tráfico aéreo se vio entorpecido por la huelga de controladores, pero con apenas anulaciones de vuelos.

En la Educación pública, hizo huelga entre el 16 y el 28 por ciento de los profesores; en la Compañía Nacional de Ferrocarriles, entre el 18 y el 27 por ciento, y en Correos, entre el 8 y el 14 por ciento. Algunos diarios no pudieron llegar hasta sus puntos de venta y también la radio pública se vio obligada a alterar su programación por la huelga.

Sesenta universidades siguen bloqueadas o son escenario de protestas y sólo 24 funcionan normalmente, según el ministerio de Educación. Cientos de institutos también continúan bloqueados.

La manifestación más importante tuvo lugar en París, donde se reunieron 700.000 personas, según los convocantes. En muchas ciudades de provincia, como Marsella, Grenoble, Lille o Rouen, la asistencia superó a la del martes pasado.

El presidente de la Confederación de Sindicatos Europeos, John Monks, presente en la manifestación de París, explicó "toda Europa está comprometida contra este proyecto" de 'contrato joven' del Gobierno francés. "No es sólo un problema francés", afirmó Monks, quien consideró "inaceptable" la propuesta de reducir los derechos de los trabajadores recién llegados al mercado laboral.