CEDIDA CABILDO DE FUERTEVENTURA
PUERTO DEL ROSARIO (FUERTEVENTURA), 12 (EUROPA PRESS)
Varios bañistas y agentes de Medio Ambiente del Cabildo de Fuerteventura han rescatado, el pasado viernes, a dos ejemplares de tortuga 'boba' (Caretta caretta) que fueron localizados en el litoral de El Cotillo, en La Oliva.
Según ha informado la Administración majorera, la primera de las tortugas fue encontrada en el entorno del Faro del Tostón. Se trataba de un ejemplar juvenil de dos kilos de peso que presentaba síntomas de necrosis en la aleta delantera derecha, posiblemente causados por enmallamiento en artes de pesca.
Por su parte, la otra tortuga fue encontrada en la laguna de El Río. Se trataba de un ejemplar de mayor edad y 16 kilos de peso, y que contaba con daños en el caparazón y una herida en el costado -achacable a un eventual ataque de depredadores marinos-.
Gracias a la rápida intervención de los bañistas que dieron el aviso, así como la actuación de los agentes de Medio Ambiente del Cabildo, permitieron resolver el caso con celeridad y trasladar a ambos especimenes al centro veterinario facultativo de Costa Calma, especializado en fauna marina accidentada.
Por el momento, el Cabildo ha informado que ninguno de los dos animales corre peligro, e incluso la primera tortuga podría salvar la aleta.
A pesar de ello, continuarán bajo cuidados veterinarios hasta su traslado a la Guardería de Tortugas de Morro Jable, donde permanecerán recuperándose un tiempo prudencial antes de su liberación definitiva en su medio natural.
Tras esta actuación, la consejera de Medio Ambiente del Cabildo, Natalia Évora, felicitó y agradeció a las personas que participaron en la intervención.
"Una vez más, la participación ciudadana ha sido fundamental para localizar y atender a la fauna marina que aparece accidentada en el litoral y las aguas de Fuerteventura", enunció Évora.
La consejera también aprovechó para congratular a la ciudadanía por estas labores: "llegados a este punto, son incontables los casos de animales que han conseguido salvar la vida gracias a la colaboración de la gente, no sólo bañistas, sino también pescadores, profesionales del sector turístico, surfistas, vecinos, etc. Son hechos todos que evidencian que la concienciación y la educación ambiental que ha emprendido el Cabildo desde hace muchos años ha dado sus frutos".
Además, añadió que dicho emprendimiento continuará porque que desde Medio Ambiente van a organizar "una suelta con grupos de personas cuando llegue el momento de devolver estas dos tortugas al mar".
RECOMENDACIONES EN CASOS DE TORTUGAS
El Cabildo recomienda, en caso de avistar una tortuga flotando en el mar, comprobar si está descansando o tiene problemas (sequedad en su caparazón, algas incrustadas, heridas, etcétera).
En caso de que haya que manipular al ejemplar, no se le debe coger por el caparazón y, para moverlo, hacerlo siempre hacia delante. Hay que tener cuidado con su pico, uñas y aletas (en caso de mordedura, no tirar hasta que abra la boca).
Una vez atendida, se debe dejar a la tortuga en un lugar fresco y preferentemente húmedo (con paños o toallas húmedas), y no darle de comer ni de beber hasta que el personal técnico llegue y recoja al animal. Para su transporte, se aconseja una caja de plástico acorde al tamaño del animal.
Si la tortuga está petroleada, se recomienda limpiar, con un paño humedecido en aceite de cocinar, los ojos, la boca y los orificios nasales, evitando que trague los residuos.
En caso de estar aprisionada en redes o plásticos, hay que tener en cuenta que estos materiales pueden provocar el estrangulamiento del animal o cortar la circulación de las extremidades originando la muerte de los tejidos. Si tiene algún miembro estrangulado por cualquier elemento (red, nailon...), no cortar este, ya que hace de barrera de patógenos.
Por su parte, en caso de que el animal tenga un anzuelo tragado o nailon, desde el Cabildo explican que no se debe liberarla con el anzuelo tragado puesto moriría en poco tiempo. Tampoco hay que tirar del anzuelo. Si sobresale el nailon de la boca, no se debe cortar a no ser que esté enredado en el animal, y en tal caso dejar siempre un margen de longitud para evitar que se lo trague (20 centímetros).
Cuando la tortuga tenga el caparazón roto o heridas abiertas, hay que aplicar Betadine en las heridas, cubrirlas con un paño humedecido en agua hasta que el personal del Cabildo la recoja.
Por su parte, si se encuentra a la tortuga en una playa y muerta hace tiempo, hay que avisar a los servicios de Medio Ambiente o al 112.
Lo que no hay que hacer es liberar una tortuga hallada hasta que sea inspeccionada por personal especializado, dado que el animal puede estar débil, infectado por parásitos, o quedarle restos de plásticos en el estómago.