CARACAS, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz del Gobierno de Venezuela, Miguel Rodríguez Torres, ha informado este lunes de que los asesinos del diputado Robert Serra realizaron un trabajo previo de vigilancia antes de llevar a cabo el ataque y ha descartado la hipótesis de que podría tratarse de un robo.
Rodríguez ha explicado que la versión del crimen planificado se confirma de acuerdo a los elementos recolectados por el Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), que permitieron elaborar una reconstrucción de los hechos ocurridos el pasado 1 de octubre.
"Hubo un trabajo previo de vigilancia, de conocimiento para saber exactamente cuál era la rutina de Robert Serra y de quienes le acompañaban", ha recalcado el ministro, en unas declaraciones que publica la Agencia Venezolana de Noticias (AVN).
Por ello, Rodríguez Torres insiste en que "alguien quería acabar con la vida de este joven líder revolucionario". "Tenemos un 95 por ciento de certeza de que a Robert Serra no fueron a robarlo, fueron exclusivamente a matarlo", ha apostillado el funcionario venezolano.
En este punto, también ha criticado las declaraciones pronunciadas por determinados sectores de la oposición, cuya referencia al caso "fue a conveniencia y por interés". Así, ha denunciado que se relacione la muerte de Serra con la inseguridad ciudadana, "como si se tratase de delincuentes comunes, tratando de justificar lo injustificable".
