Trib.- (Ampl.) El acusado de violar a una joven en Guía (Gran Canaria) asegura que la relación sexual fue "consentida"

Actualizado: miércoles, 11 junio 2008 17:57

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 11 Jun. (EUROPA PRESS) -

El hombre acusado de supuestamente violar a una joven al terminar una verbena celebrada en el barrio de La Atalaya, en Santa María de Guía (Gran Canaria), aseguró hoy durante el juicio que la relación sexual fue "consentida" y que la víctima le denunció "por dinero".

La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Las Palmas celebró hoy el juicio contra F.F.S.B., mayor de edad y sin antecedentes penales, acusado de un presunto delito de agresión sexual con acceso carnal y para quien la Fiscalía pidió en su escrito de conclusiones provisionales 14 años de cárcel.

El acusado explicó que el día 12 de junio de 2005 se encontraba en las fiestas de La Atalaya y alrededor de las cinco de la madrugada abandonó el lugar en compañía de una chica con la intención de trasladarla a su domicilio debido a que ésta se encontraba en estado de embriaguez, pero ella le propuso "dar una vuelta" y se desplazaron en su vehículo a la zona de Bocabarranco, donde admitió haber mantenido relaciones sexuales, por lo que se contradijo respecto a sus dos anteriores declaraciones ante la policía y el juez.

Al contradecirse, el fiscal preguntó por qué cambió su versión y contaba en el juicio "la verdad a medias" y el acusado alegó que "había sufrido mucho" y sentía "miedo" porque "a veces van a la cárcel personas inocentes", aseguró.

Resaltó que en el momento de las relaciones sexuales en su turismo, la chica "estaba bastante bien, conciente y no estaba borracha" y añadió que al terminar fumaron y siguieron hablando, instante en el que ella le comentó "que no quería que se enterara su novio" y le dijo que quería ser su novia, extremos que negó la víctima en su declaración como testigo.

F.F.S.B. añadió que al día siguiente de los hechos la chica siguió hablando con él porque viven "al lado" y al mes se enteró de que le había denunciado. A su juicio, el motivo de la denuncia es "por dinero porque ella sabe que tenía fincas de plataneras", agregó el acusado. Igualmente, apuntó que ella le siguió enviando mensajes al móvil para quedar y le llamó a la semana siguiente hasta que él le dijo que dejara de molestarle.

"NI SIQUIERA LE TIRÉ LOS TEJOS".

Por su parte, la víctima, que trabajaba con su supuesto agresor en la finca de éste, negó que el acto sexual fuera "voluntario", ya que "ni siquiera" le tiró los tejos". Explicó que le pidió que le llevara en su vehículo a su casa porque se había bebido tres cubatas, pero no sabe adónde la llevó puesto que estaba "adormilada por los efectos del alcohol".

En un momento dado despertó y lo encontró "encima" de ella quitándole la camiseta, le bajó los pantalones y las bragas y, mientras la besaba, comenzó a tocarle los pechos con ambas manos, al tiempo que se resistía apartándole e intentando zafarse sin conseguirlo por estar en estado de embriaguez.

Insistió en que "en todo momento" le dijo que la dejara porque no quería tener relaciones, pero F.F.S.B. siguió y le penetró la vagina en dos ocasiones y "eyaculó". De hecho, incidió en que vomitó "dos o tres veces", pero él siguió encima de ella.

Recalcó que al terminar, se vistieron y la llevó a su casa, donde, nada más llegar se bañó y tiró la ropa a la basura. Asimismo, afirmó que días después oyó que su presunto agresor "decía que si él iba a la cárcel" la "mataba", por lo que sintió miedo al presentar la denuncia, que llegó a retirar en una ocasión.

Por otro lado, la víctima sostuvo que no vio más a F.F.S.B. después de lo ocurrido y que desde entonces "ha cambiado" su vida, ya que padece "fobia, temores e inhibición" que le impiden salir sola de su vivienda y continúa en tratamiento psicológico.

SENTIMIENTO DE CULPABILIDAD.

Las psicólogas que atendieron a la víctima destacaron en el juicio que la joven padece "sensación de culpabilidad porque entendía que había propiciado la situación" al solicitar ayuda a F.F.S.B. para que la llevara a su domicilio.

El informe de los peritos sostiene que el relato de la víctima era "corriente" y "mantiene una estructura del relato adecuada", al tiempo que indicaron que, a consecuencia de la acción, sufre lesiones psicológicas consistentes en un "permanente trastorno ansioso-depresivo".

Por su parte el novio de la joven, que también trabajaba con el presunto agresor, indicó que días después de lo sucedido llamó varias veces a su jefe para que le llevara al trabajo, pero no le contestó y entonces ella le comentó que el motivo era "porque la había violado" y se quedó "sin palabras". Agregó que durante aquellos días notaba a su novia "rara y sin querer mantener relaciones sexuales" con él.

LA ACUSACIÓN PARTICULAR PIDE 150.000 EUROS DE INDEMNIZACIÓN.

Por todo ello, el Ministerio Público solicitó en su escrito de conclusiones provisionales imponer 14 años de cárcel para el acusado por un presunto delito de agresión sexual con acceso carnal, además de la prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima durante seis años.

Asimismo, el fiscal solicitó que se indemnice a la víctima con 15.000 euros por los daños morales ocasionados y en la cantidad que se determine en ejecución de la sentencia respecto de los gastos médicos y farmacéuticos por las lesiones psicológicas causadas.

Por otro lado, la defensa solicitó la libre absolución para su cliente, mientras que la acusación particular pidió la misma pena que el Ministerio Fiscal, aunque, en concepto de responsabilidad civil, reclamó una indemnización de 150.000 euros.