El Ayuntamiento garantiza accesos provisionales a Maristas el 7 de septiembre y asegura los definitivos a mitad de curso

Actualizado: lunes, 30 julio 2007 16:21

El acceso definitivo supondrá un vial y dos rotondas en Pedregales y Gustavo Adolfo Bécquer

LOGROÑO, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -

El concejal de Movilidad Urbana, Domingo Dorado, garantizó hoy que Maristas tendrá accesos provisionales el 7 de septiembre, cuando comience el curso escolar, que den un "mínimo de seguridad". Además, avanzó que habrá otros definitivos que estarán listos "a mediados de curso"

Dorado ofreció una rueda de prensa acompañado del concejal de Urbanismo, Miguel Gómez Ijalba. En ella, criticó que el nuevo Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Logroño se encontró con "problemas poco entendibles" para solucionar los accesos a Maristas, teniendo en cuenta que "el curso empieza el 7 de septiembre y para el 29 de junio no estaban garantizados".

Recordó que había un convenio con el colegio por el que se "garantizaba" el acceso con un proyecto aprobado por el Ayuntamiento. Sin embargo, éste suponía, dijo, asfaltar "ligeramente" el camino de Cascajos hasta la conexión con Calle Vieja y crear una salida con aceras de "un metro y poco más".

Dorado consideró que esta solución era "peligrosa" teniendo en cuenta que, cada día, llegarán al colegio cien peatones, cuatrocientos coches privados y catorce autobuses. "Caos y problemas de seguridad vial" les esperaban, bajo su punto de vista, a todos ellos con esta conexión.

El Ayuntamiento, indicó, se ha puesto "manos a la obra" ante esto y ha planificado, en primer lugar, una solución provisional para que pueda estar en marcha el primer día de colegio, y que suponga un "mínimo de seguridad" hasta que estén los accesos definitivos.

Para empezar, se evitará el acceso peatonal desde Gustavo Adolfo Bécquer, ya que se hace sin aceras, ni arcén, y, además, hay unos chalets cuyas vallas quitan espacio. Por tanto, se impedirá el paso físicamente con unas jardineras y se quitarán los pasos de cebra.

En cambio, se hará "seguro" el paso de peatones sobre la calle Pedregales, el otro acceso sobre la circunvalación. Para ello se reducirá la velocidad de los vehículos, habrá policías y, en la zona sur, se instalará una acera "separada de la circunvalación".

En cuanto a los autobuses, explicó que no se quiere dar "facilidades" a una entidad privada como es Maristas, pero sí se quiere facilitar su uso a los alumnos. Por eso, se "favorecerá" que pasen por el lugar las líneas 3 y 11 y, en el caso de la segunda, se crearán dos paradas más; una en Vara de Rey y otra en el cruce con Maristas.

Los vehículos, por su parte, y también por "seguridad", no podrán salir por Calle Vieja, sólo la podrán usar para entrar. En este sentido, señaló que sí hay un tramo que es de entrada y salida, para uso de las urbanizaciones y la residencia que se encuentran en el lugar, así como de los camiones.

Quienes usen la calle para ir al colegio deberán salir por Avenida de Madrid. Los padres, aseguró, no paralizarán el tráfico que llegue por esta vía, ya que deberán ceder el paso al resto de vehículos.

Para facilitar el tránsito por Calle Vieja, se ampliará su anchura hasta cuatro metros, se eliminarán agujeros y maleza, se habilitará un arcén de un metro para los peatones y se señalizará la vía.

Gómez Ijalba completó que, mientras, se desarrollará una solución definitiva, cuyas obras comenzarán esta semana y que consistirá, sobre todo, en dos rotondas en Calle Vieja y en Gustavo Adolfo Bécquer a través de un nuevo vial.