Detectados cinco focos de fuego bacteriano en el área de principal riesgo en el Valle del Iregua

Actualizado: martes, 1 julio 2008 14:55

LOGROÑO, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha detectado 5 muestras positivas en parcelas de Albelda de Iregua de fuego bacteriano, por lo que se ha activado el sistema de control de la enfermedad, que incluye el arranque de la planta enferma y de todos los árboles incluidos en un radio de 10 metros alrededor del brote detectado, según informó hoy el director general de Calidad e Investigación Agroalimentaria, Pedro Sáez Rojo.

Explicó que la aparición de los focos, detectados en peral, hace que se vaya a "extender" el radio de seguridad, ubicado entre Nalda y Albelda, hacia la localidad de Lardero. También señaló que mañana comenzará el arranque y destrucción de una de las áreas afectadas. Recordó que en 2006 y 2007 se dieron focos de fuego bacteriano en el valle del Iregua.

Por otra parte, Sáez Rojo informó de la campaña de control y prevención de la enfermedad producida por la bacteria 'Erwinia Amylovora', más conocida como 'Fuego Bacteriano'. Un mal que afecta a las familias de las rosáceas; a los frutales de pepita como los perales, los manzanos, los espinos y otros arbustos tanto en la producción agrícola como en su utilización en áreas de ocio y esparcimiento, lo que hace más difícil su localización y el tratamiento preventivo en cuanto se dan los primeros síntomas.

La apariencia de esta enfermedad es claramente visible en la mayor parte de las especies, como en el peral, puesto que aparece como quemado o ennegrecido. Después se forman chancros (úlceras) en las ramas, produciendo una viscosidad bacteriana amarilla o blanca, según la variedad de dicha bacteria. Los chancros en tronco y cuello de raíz provocan la muerte de la planta completa.

Ante ello, Sáez Rojo indicó que hay que advertir a los servicios técnicos, inmediatamente, en cuanto se aprecien los síntomas de la enfermedad, ya que se "requiere un tratamiento especializado de eliminación mediante fuego y una labor de desinfección de los útiles de poda y tala. En caso de no actuar diligentemente la enfermedad puede extenderse fácilmente".

Como es habitual, la Consejería de Agricultura está desarrollando en esta temporada estival -propicia para el desarrollo de la enfermedad- una serie de controles que, en primer lugar, detecten la presencia de focos y, en segundo lugar, limiten su incidencia a través de un estricto protocolo de actuación.

De tal forma, la Consejería de Agricultura tiene trabajando en estas prospecciones de fuego bacteriano a un total de 12 personas, en una tarea que se extenderá hasta el mes de septiembre. Un estudio sistemático que se realiza sobre 213 parcelas frutales distribuidas en 30 municipios con gran tradición frutícola, principalmente en la zona del Iregua.