El divulgador, Eduardo Sáenz de Cabezón, reivindica "el papel de Emmy Noether como la madre de las matemáticas modernas"

Publicado: domingo, 3 noviembre 2019 19:48

LOGROÑO, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -

El matemático y divulgador científico, Eduardo Sáenz de Cabezón, reivindica el papel de Emmy Noether "como la madre de las matemáticas modernas a pesar de que siga siendo una gran desconocida" a través de una rigurosa obra de divulgación matemática con un lenguaje cercano, sencillo y desenfadado denominado 'El árbol de Emmy'.

Emmy Nother fue la matemática más importante de la historia y una de las científicas más destacadas de todos los tiempos. En 1937 recibió el Premio Ackermann-Teubner al desarrollo de las matemáticas junto a Emil Artin y el mismo Albert Einstein la consideraba un genio.

'El árbol de Emmy' nos introduce también las mujeres matemáticas más destacas de la historia y las principales aportaciones que hicieron. "Emmy Noether es la matemática que más admiro y probablemente la científica cuyos logros están a mayor distancia de su reconocimiento, distancia que se debe exclusivamente al hecho de ser mujer. Por sus contribuciones fundamentales en los campos de la física teórica y de la álgebra abstracta muchos la consideran la madre de las matemáticas modernas y una de las mentes más brillantes de su tiempo, y el suyo fue un tiempo de mentes que brillaron intensamente".

A pesar de ello, Emmy Noether continúa siendo una gran desconocida para casi todos. Mujer, judía y matemática en la Alemania del primer tercio del siglo XX, Emmy superó todas las barreras que la vida y la sociedad le impusieron.

Tuvo la mala fortuna de nacer en una época donde las mujeres estaban excluidas de vida académica ya que su admisión en las aulas "destrozaría el orden académico".

En 'El árbol de Emmy', Eduardo Sáez de Cabezón nos relata, de forma rigurosa y con un lenguaje cercano y familiar más propio de la novela que del ensayo, todos los obstáculos y pequeños logros que convirtieron a Emmy Noether en una de las grandes mentes del siglo XX.

Una mente en cuerpo de mujer que condicionó su carrera académica, como la de muchas científicas a lo largo de la historia.

La idea de este libro surgió tras una serie de tuits que Eduardo Sáenz de Cabezón dedicó a mujeres matemáticas a finales de 2017. Cada dia tuiteaba el nombre y la fotografía de una matemática relevante y pedía a la gente que aportara información sobre ellas. Muchos se volcaron con la iniciativa, en especial el grupo de divulgadores científicos Los Tres Chanchitos, y entendió que 'El árbol de Emmy' debía contener el ejemplo de otras mujeres matemáticas que brillaran en un ámbito que fue y sigue siendo en gran medida masculino.

Eduardo Sáenz de Cabezón, como buen divulgador, quiere romper el cliché de que las matemáticas son cosa de hombres o que son tan odiosas como aparentan; en ellas intervienen la creatividad, la intuición, el cálculo, la imaginación, la técnica... y ello no entienden de género. Simplemente hace falta una mente curiosa y dispuesta a divertirse.