LOGROÑO, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
Las obras para la reconstrucción del Puente Mantible, tras el derrumbe que sufrió el pasado 24 de enero, y que constituirán su consolidación "definitiva", comenzarán a lo largo del próximo verano, durarán 10 meses (frente a los 5 ó 6 previstos inicialmente) y aumentan su presupuesto en un 8,9%, hasta los 773.200 euros.
Son los datos que, este martes, han dato el concejal de Patrimonio, Adrián Calonge, y el edil del Grupo Mixto, el regionalista Rubén Antoñanzas, que, en rueda de prensa conjunta, han dado a conocer las principales conclusiones de la asistencia técnica que se ha reformulado para la recuperación del puente tras el colapso en la margen logroñesa.
Como ha señalado Antoñanzas, el derrumbe "no se produjo por una causa única" y, en este sentido, ha recordado "el movimiento de la pila 2 hacia el río y la caída masiva de dovelas o de fragmentos de la bóvedad", a lo que ha sumado "la grieta subacuática que se ha podido hacer más grande".
En concreto, la asistencia técnica indica, ha dicho el edil del PR+, "que queda constatado que, en la pila 2, se han dado desprendimientos de grandes lajas de piedra", además de que se han encontrado "cinco grandes grietas, tres de ellas abiertas, una parcialmente sellada y otra, con desplazamiento del plano, que es grande hacia el río, de unos 10 centímetros".
Por ello, Antoñanzas ha señalado que "se va a seguir monitorizando la pila" y que "se van a recuperar las piezas caídas", para volver a colocar en su lugar las que se puedan instalar, ya que se cuenta para ello con los estudios topográficos y gráficos realizados en 2017 y en 2019.
Igualmente, respecto al estribo de la margen derecha, junto a El Cortijo, ha señalado que se trabajará en su limpieza, consolidación y restauración. Además, ha recordado que también se va a actuar en los accesos al puente, así como en su difusión y puesta en valor.
Por su parte, Calonge ha dado cuenta de que, entre las novedades de la asistencia técnica, se encuentra que, en la pila 2, "tras encontrar en el año 2019 la oquedad en el estudio subacuático, se piensa que se ha podido hacer mayor o, incluso, que haya nuevos huecos", por lo que se va a realizar una nueva prueba bajo el agua.
Luego, el proyecto "contempla el sellado de estas oquedades con material hidrofugante". Respecto a los estratos, con al menos dos lajas de piedra desprendidas por la propia erosión del agua, el concejal ha explicado que "serán cosidos con tirantes de acero para sujetar tanto las capas de tierra como la base de la pila".
Como "lo más novedoso" del proyecto ha apuntado a la reconstrucción por anastilosis, que ha definido Calonge como "una especie de puzzle que se hará con los restos conservados y caídos en el lecho del río", que tienen una media de peso de entre 5 y 850 kilos "y entre los que ya se verá cuáles se pueden recuperar y cuáles no".
Una vez que se cuente con los restos recuperados, "con los modelos existentes, podremos ver dónde se encontraba cada uno". De este modo, la anastilosis se desarrollará en dos fases: la primera, "la limpieza y restauración de las piedras", entre las que ha que se podrá contar con en torno a un 80% de las originales.
Y la segunda fase, con la pila ya restaurada, "se hará una gran estructura de metal para la cimbra y el arco"; se realizará también la unión del arco a los restos de los arranques, con piedra y morteros hidrofugantes; y "lo más novedoso de la actuación", la limpieza de todo el puente "con métodos manuales, con cepillos de cerdas naturales, agua atomizada o incluso agua a presión".
Por último, se van a rellenar los huecos y grietas existentes, se colocarán elementos tensores para fijar el conjunto y se comprobarán cada uno de los puntos de unión de la cimbra. Todo ello, ha detallado el edil, conlleva que "de los 5 a 6 meses de ejecución del proyecto original, se aumentan a 10 meses, y el presupuesto, de unos 703.500 a 773.200 euros, un 8,9% más, en torno a 68.700 euros más".
Calonge ha apuntado que "ya se han pedido los permisos necesarios", también al Gobierno de La Rioja, por lo que ha calculado que este mes "entrará en licitación", que se podrá resolver a principios de verano, de manera que, a lo largo de esa estación, se pueda comenzar la obra, "porque, además de lo más urgente, que es la consolidación de la pila, hay que actuar en algunos puntos antes de que lleguen las inundaciones".
De este modo, "lograremos que el Puente Mantible vuelva a ser lo que era", por lo que, en palabras del concejal de Patrimonio, supone igualmente que "se van a seguir llevando controles continuos para su futuro mantenimiento".
