El PSOE denuncia el "descenso en la cantidad y calidad" del arbolado de Logroño por obras,talas,trasplantes "y abandono"

LOGROÑO 30 Ago. (EUROPA PRESS) -

La concejala del PSOE Concepción Arribas denunció hoy el "descenso en la cantidad y calidad" del arbolado en Logroño, una situación que achacó a las obras de los aparcamientos subterráneos, las talas "indiscriminadas", trasplantes y, en general, "al abandono por parte del equipo de Gobierno".

Arribas aseguró que el Ejecutivo logroñés "miente cuando, por ejemplo, el alcalde dice que, por cada árbol que se quite, se plantan cinco; si es así, no me salen las cuentas" e insistió en que "mienten cuando dicen que Logroño tiene más masa arbórea que otras ciudades del entorno".

En concreto, la edil socialista hizo referencia a talas "como las de Las Tejeras, Los Tilos, el Parque de San Adrián, el cedro del Espolón o Duquesa de la Victoria"; a trasplantes, sobre todo en el caso de las obra de los estacionamientos de Gran Vía, Avenida de España, Acesur, Semillero o Valcuerna, con los que sumó más de 650 árboles; "y abandonos en barrios, no hay más que ver Varea".

Indicó que "el 80 por ciento de los árboles que se han trasplantado se han secado" en su nueva ubicación de La Grajera, o los cedros "muertos o casi" del Parque del Carmen, los árboles frente a las obras del Hospital San Millán o al cuartel de Murrieta "que no tienen alcorques y se van a secar".

A ello sumó las podas "indiscriminadas" en los plátanos de Avenida de Navarra o El Espolón, de los abedules en Vara de Rey "o los árboles dañados por toda la ciudad por la colocación de la fibra óptica"; y los actos de vandalismo "con lo que se puede decir que hay muy pocos árboles en el centro de Logroño".

Por contra, criticó la plantación, al final de la nueva urbanización de Gran Vía de unas seis palmeras "de estética dudosa y que no sabemos cómo van a aguantar el clima de la ciudad". Recalcó, en este sentido, "la globalización del paisaje de las ciudades, porque en muchas de España y de Europa se están plantando palmeras"; o de las jardineras de la calle Portales.

"Se apuesta por una ciudad sin árboles. Logroño está cambiando de color, del verde de los árboles que tenía antes al gris de ahora", finalizó la concejala.