LOGROÑO, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de La Rioja (UPA), Eusebio Fernández, tranquilizó hoy ante "una posible extensión" de la plaga de topillos en La Rioja. "Todavía tenemos margen, llegará el invierno antes de que lleguen aquí", aseguró.
Fernández contó que en todo caso "el invierno ayudará a minimizar un poco este asunto", pero mantuvo la alerta, porque "si no se busca una solución, llegará aquí y tendremos un problema más que preocupante".
Según el secretario, deberán tomarse "medidas muy drásticas, más serias que arar más profundo". "No me creo que con eso se pueda controlar toda una plaga", afirmó.
Asimismo, advirtió de la presencia de topillos en los bosques y en las cunetas de carreteras y caminos. "Aunque consigamos mañana quitarlos de las parcelas, no podemos retirar el monte", señaló, y advirtió del peligro que supondría la entrada de una plaga en zonas extensas de bosque de La Rioja, como Montes de Oca.
Fernández calificó la plaga de topillos como "una cuestión muy seria, más seria de lo que se está haciendo ver" y dijo que la Administración "se lo tiene que tomar muy en serio".
"Hasta ahora lo han querido esconder", afirmó, y criticó que la Comisión "no está contando con los agricultores, que son los actores principales".
También acusó a la Unión Europea "por la condicionalidad de no laboreo que nos impone a los agricultores" y añadió que "encima no nos han dejado hacer frente a esto".
Se trata de un problema que "se empezó a ver desde hace unos diez meses", indicó. "Entonces pedimos unas acotaciones que no se han dado", remarcó.
LA TULAREMIA
Fernández alertó sobre los casos de tularemia causados por los topillos. "La Junta de Castilla y León sigue diciendo que esta enfermedad ha sido originada por comer cangrejos", criticó.
El secretario explicó que en realidad el contagio es debido a que los cangrejos recogidos en el río comieron topillos muertos". En este sentido, habló de que la enfermedad puede ser transmitida "incluso por un mosquito".
Fernández indicó que "se está intentando minimizar este problema". "Hay un centenar de casos de tularemia reconocidos, pero puede haber unos doscientos", concluyó.
