Archivo - Manos de una anciana y su cuidadora - DIPUTACIÓN - Archivo
LOGROÑO, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
Con un convenio colectivo congelado desde el año 2018, las trabajadoras de Ayuda a Domicilio se han concentrado hoy frente al Ayuntamiento de Logroño pidiendo una actualización de sus salarios, mejores condiciones laborales y mayor protección ante la COVID.
El secretario general de Comisiones Obreras del Hábitat de La Rioja, Jose Antonio Torres, ha explicado que la "degradación" de las condiciones de trabajo de las personas que ejercen la ayuda a domicilio comenzó antes de la pandemia.
Ha señalado que "tienen un convenio colectivo caducado desde 2018, están rotas las negociaciones y las empresas alegan que" la culpable "es la falta de oferta económica de las administraciones".
Ha creído "necesario" que desde los ayuntamientos, mancomunidades y gobiernos regionales "den unas partidas económicas que ayuden a que las licitaciones salgan en unas condiciones que no dejen precariedad en el sector".
Ha insistido en la necesidad de que "las trabajadoras no sean las que soporten esa falta de inversión en las adjudicaciones".
Ha relatado cómo, desde las empresas, se les pide que "quiten minutos a los ususarios y los usen en los desplazamientos"; éstos, además, ha dicho, "los tienen que realizar que parece que tienen alas o vuelan" y las que ejercen en los pueblos tienen que usar su coche particular.
Ha pedido que se les hagan test de antígenos y, en este sentido, Ana Isabel Ordoñez, auxiliar de ayuda a domicilio en Logroño, ha explicado que trabajan con mascarilla quirúrgica, cuando necesitarían una FFP2: "Se nos vacunó a finales de febrero y ya con eso se supone que somos inmunes", ha indicado.