MADRID, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
El delegado de Seguridad y Movilidad en el Ayuntamiento de Madrid, Pedro Calvo, anunció hoy que un acuerdo de Junta de Gobierno, que se aprobará en el plazo de un mes, pondrá fin a más de siete meses de negociación con policías municipales, agentes de movilidad y bomberos para que puedan aplicarse los fondos adicionales con los que se mejorarán sus retribuciones bajo la idea de que "quien trabaje más cobre más".
La decisión adoptada por el Gobierno municipal, acordada como "medida de interés general", llega después de que los sindicatos no aceptaran ayer poner un calendario a la negociación. El pasado lunes, el edil avisó que se tomarían estas medidas si la negociación seguía estancada antes de Semana Santa. "Tras siete meses de negociaciones y cinco propuestas (por parte del Gobierno) no es justificable que se exija que sigamos condicionando la aplicación de unos fondos a un acuerdo sin fecha", sostuvo el concejal.
Esos fondos de complemento salarial fueron de 8 millones previstos para 2009, 4,5 para 2010 y otros tantos para 2011, unas cantidades que siguen a la espera de poder ejecutarse en la parte correspondiente a estos tres colectivos. Sí se han aplicado con el Samur, que llegó a un acuerdo a finales de año.
Calvo explicó que en ningún momento se reducirá el sueldo a ningún funcionario que no quiera acogerse a las contraprestaciones que el Gobierno local exige para cobrar esos fondos extras. De hecho, reciben este año en sus nóminas un 0,3 por ciento más, como establece la Ley de Presupuestos Generales del Estado, una subida prevista para todos los funcionarios.
MEJORA SALARIAL ADICIONAL
Lo que oferta el Ayuntamiento es una mejora salarial adicional, completamente voluntaria, a cambio de mejoras en el servicio, ya sea trabajar en horas de mayor demanda ciudadana, como noches y fines de semana, o añadir más jornadas u horas en momentos de servicios adicionales. Aquí estriba la principal diferencia con los sindicatos ya que ellos, como aseveró el delegado, apuestan por "subidas lineales" sin que medie "contraprestación alguna". "Eso no sería una actitud responsable por nuestra parte", zanjó el edil.
Calvo expuso que siempre es positivo un crecimiento en las plantillas pero con estos fondos "no se busca un incremento de personal sino mejores resultados con la plantilla existente". En este punto, señaló que la aplicación de los fondos significará un ahorro en los bolsillos de los madrileños ya que los equipos voluntarios de policías para trabajar las noches de jueves a sábado --lo que supondrá 40 patrullas más y un incremento del 20 por ciento con respecto al servicio actual-- supondrá que no será necesario contar con 150 policías más, lo que conllevará un ahorro de 6,5 millones de euros.
La medida voluntaria para flexibilizar horarios y prestar servicios adicionales implicaría, sin estos fondos, 400 policías más y un coste de 16 millones. En definitiva, se trata, en palabras de Calvo, de "cuerpos bien retribuidos" a los que el Gobierno local "está dispuesto a retribuir más a cambio de más trabajo".
En este sentido, el edil expuso que la jornada media anual de un policía municipal es de 1.554 horas mientras que la del resto de trabajadores españoles es de 1.776. Trabajan cuatro días a la semana, de media, frente a los cinco del resto. Además su salario bruto anual es de 38.382 euros, sin horas extras, muy por encima de la media nacional (21.315) o de lo que gana un guardia civil (22.948) o un policía nacional (26.374). Sin embargo, el sueldo de un bombero está por encima del de un policía municipal, con sus 44.711 euros anuales.
ABSENTISMO LABORAL
Lo que el equipo de Calvo busca de paso con la aplicación de estos fondos es la reducción del absentismo laboral. Y es que en el caso de los policías se contabilizan, de media, 51 ausencias del puesto de trabajo al año y hasta 57 en el caso de los agentes de movilidad. La media del absentismo en el caso de los bomberos es del 8 por ciento.
Calvo asumió que con esta decisión se producirá un mayor grado de conflictividad sindical, lo que le llevó a repasar las actuaciones de algunos sindicatos, no todos, matizó, como "las campañas de huelga encubiertas, el Plan 0,0 (cero multas, cero infracciones), las presiones para que no se hagan horas extras o las manifestaciones que han vulnerado las autorizaciones de Delegación de Gobierno en itinerarios o cortes de tráfico". También espera que "no haya amenazas" para los que se acojan a estos servicios voluntarios aunque dijo que éstas "son bastante comunes en algunos sindicatos, no en todos".
Preguntado por si el Gobierno da por finiquitadas las conversaciones con los sindicatos, el delegado afirmó que están "dispuestos a sentarse todas las veces necesarias pero no en una mesa que no se sabe cuándo acabará". "Nosotros no rompemos la negociación, estamos dispuestos a seguir con ella", matizó.