MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha enviado una carta a la familia del cineasta, Luis García Berlanga, que ha fallecido hoy, para transmitirle sus "más sinceras condolencias".
Según ha informado el Ejecutivo regional, en la carta remitida por la presidenta, Aguirre afirma que la muerte del cineasta le "llena de tristeza" porque le une "una larga y sincera amistad" con él y su familia, y porque supone la desaparición del "mejor director de cine español de los últimos cincuenta años".
"Todas sus películas son auténticas obras de arte, y lo son porque en ellas Berlanga sabe abordar los más profundos asuntos humanos con una delicadeza especial y, siempre, con un inigualable sentido del humor", afirma Aguirre en la misiva en la que señala que por eso, "todas sus películas conservan el frescor y la vigencia que tenían cuando se estrenaron y por eso, sus películas se seguirán viendo y admirando siempre".
Asimismo, indica que "su sentido del humor y su especial capacidad para comprender los dramas humanos le sirvieron para retratar de manera crítica muchos de los aspectos de la España que le tocó vivir". "Una crítica que siempre tuvo el contrapunto del humor, lo que la hacía aún más eficaz y más humana. Si se me permite definir con una sola palabra el cine de Berlanga diría que es el más cervantino de nuestros cineastas por el cariño con que sabe reírse de sus personajes para hacernos reír a todos y para hacernos pensar", añade a renglón seguido.
En la misiva, también afirma que "en estos momentos de dolor por su muerte" espera que "el recuerdo de su extraordinaria personalidad, su espíritu insobornable, su inmensa inteligencia, su manera de entender la amistad, su sentido de la libertad y su buen humor", que los españoles van a poder disfrutar siempre viendo una y otra vez sus películas, servirá a María Jesús, a sus hijos y a todos los que lo admiran de consuelo.
En 2004, la Comunidad otorgó al cineasta valenciano la Medalla Internacional de las Artes 2003 como reconocimiento a su labor en la difusión internacional de la región como espacio de referencia cultural.
Precisamente, ésta fue la primera Medalla Internacional de las Artes que Aguirre entregó tras su llegada al Gobierno regional.
