MADRID, 20 May. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Madrid manifestó hoy sus discrepancias con el informe realizado por la Fiscalía de Medio Ambiente sobre la calidad del aire de la capital al considerar que parte de una "base errónea" en la aplicación de una normativa "ya derogada en algunos casos".
Así lo expuso hoy el vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, donde añadió que el equipo de Gobierno no dudaría, "si hubiera necesidad", de complementar las medidas que se contemplan habitualmente para mejorar la calidad del aire "con otras que pudieran establecerse legalmente".
Tras el apercibimiento recibido por la Fiscalía de Medio Ambiente este martes, que subrayó los problemas de contaminación en la capital, la delegada de Medio Ambiente, Ana Botella, ya indicó que la red de calidad de aire de Madrid es la más antigua del país, con 30 años de vida. "En 30 años, ni tiene nada que ver la configuración urbanística de la ciudad ni existía la UE, ni los contaminantes que se medían respondían a los mismos criterios", recalcó.
A eso añadió que hay que tener en cuenta que, como Madrid va a tener que cumplir los mismos parámetros que una serie de ciudades europeas la ciudad "tiene que tener los mismos instrumentos de medición para no inducir al error", afirmó.
DISCEPANCIAS "DE FONDO"
Por su parte, Cobo insistió hoy en las "discrepancias de fondo" con el informe de la Fiscalía debido a la existencia de "errores" al considerar "valores no recogidos en la normativa actual" o bajo "una interpretación inadecuada". Éste sería el caso de las partículas en suspensión PM10, donde se incluye el valor indicativo de la Directiva 1999/30 eliminado posteriormente por otra directiva.
A su vez, el vicealcalde destacó sobre la medición por estaciones que la nueva directiva establece que deben medirse en lugares representativos de un área de al menos 100 kilómetros cuadrados, "lo que no se puede alcanzar con una estación urbana, como es elemental".
Desde el equipo de Gobierno, Cobo insistió en que la evolución de la calidad del aire en la ciudad "ha sido positiva" constatándose no sólo "en los bajos niveles de dióxido de azufre y monóxido de carbono actuales sino también en la disminución de los niveles de partículas en suspensión y dióxido de nitrógeno".Destacó asimismo que en 2009 "no se registró ninguna superación del umbral del ozono".
En el caso de las partículas en suspensión PM10 se produjo un "descenso en todas las estaciones", una situación que se inició en 2005. Tampoco el año pasado se superaron los valores límites mientras que los datos del primer trimestre de este 2010 "confirman la tendencia claramente". La misma situación podría aplicarse a las partículas PM 2,5 mientras que en lo referido al dióxido de nitrógeno afirmó que los niveles son más elevados aunque presentaron una "evolución positiva".
En definitiva, para el equipo de Gobierno la calidad del aire en Madrid es "saludable" de acuerdo a los baremos que marca la Unión Europea. "La calidad del aire tiene que mejorar más y tenemos que disminuir todavía mucho más algunos aspectos que no han disminuido tanto como otros y es por eso que todas las administraciones tomamos medidas para que la calidad sea cada vez mejor", argumentó Cobo.