El Ayuntamiento edita una guía práctica de urbanismo con enfoque de género donde promueve una ciudad "libre de miedo"

Actualizado: martes, 6 marzo 2018 14:22

Apuesta por fachadas abiertas, con ventanales, múltiples accesos, donde los vallados desaparezcan y con usos públicos en las plantas bajas

MADRID, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Madrid edita 'Ciudades igualitarias', una guía práctica de urbanismo con enfoque de género donde promueve una "ciudad libre de miedo", "de distancias cortas" y "de proximidad".

El libro ha sido presentado este martes por las autoras, el delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, y la delegada de Políticas de Género y Diversidad, Celia Mayer, en un acto más enmarcado en las actividades por el 8M, Día de la Mujer.

Editada conjuntamente por las áreas de Desarrollo Urbano Sostenible, Políticas de Género y Diversidad, y Salud, Seguridad y Emergencias, su elaboración arrancó en 2010, cuando la perspectiva de género en el planeamiento urbano no era un requisito legal sino una buena práctica en el marco de la estrategia de igualdad del Ayuntamiento.

'Ciudades igualitarias. Guía práctica de urbanismo y género' supone una reflexión sobre las cuestiones del planeamiento urbano y los parámetros sobre los que habría que incidir para conseguir una ciudad más igualitaria dado que el diseño urbanístico tiene incidencia directa en cómo se desenvuelve la vida diaria, ha destacado tanto Calvo como Mayer.

La publicación de esta guía ahora responde al cambio en la política urbanística del Ayuntamiento, que está adoptando "nuevos enfoques con perspectiva de género, además de estar comprometida con valores como la sostenibilidad, la inclusión social y el reequilibrio territorial".

El diseño de los espacios públicos, en la medida que determinan las posibilidades de ver y ser vistos, deberían generan seguridad para la autonomía de niñas y niños, han explicado desde el Ayuntamiento. El diseño universal y accesible es fundamental también para para la integración de las personas mayores.

LA DESAPARICIÓN DE LOS VALLADOS

También el diseño de los edificios como configuradores del espacio urbano tiene que contribuir a dotar a la ciudad de la sensación de seguridad y facilidad de acceso, con fachadas abiertas, con ventanales, múltiples accesos, donde los vallados desaparezcan y con usos públicos en las plantas bajas que generen espacios con más vida urbana.

A eso se suma que la existencia de espacios comunitarios debería tener la capacidad de facilitar el encuentro y la relación social, así como facilitar nuevas formas de convivencia y contribuir a la integración de unidades familiares diversas.

"LIBRE DE MIEDO"

Se trata, en definitiva, de favorecer el uso del espacio público 'libre de miedo' porque "no cabe hablar de equidad e igualdad si la mitad de la población sufre temor o restringe el uso y disfrute de la ciudad a causa del miedo", como ha argumentado la delegada de Política de Género.

La Policía Municipal de Madrid también atenderá a los resultados de este estudio en este sentido para la planificación de patrullajes en los barrios, por ejemplo.

El delegado de Desarrollo Urbano Sostenible ha explicado que durante sus diez años de paso por la universidad en ningún momento, ni en la carrera ni en el posterior doctorado, ningún profesor le habló de la relación entre género y urbanismo.

La primera vez que esta relación se puso encima de la mesa fue con la anulación del Plan General de Boadilla, con 'El Albondiguilla', Arturo González Panero, como alcalde. Se tumbó el documento urbanístico por la falta del informe de género.

"Hsata ahora el informe de género era un trámite pero nosotros hemos intentado que ese informe deje de serlo y comience a ser un elemento fundamental para hacer ciudades mejores", ha expuesto Calvo, que ha precisado que para hacer eso realidad se necesita bibliografía especializada que hasta el momento prácticamente no existía. Esta guía viene a paliar ese déficit.

PUNTOS NEGROS PARA LA SEGURIDAD DE LAS MUJERES

Celia Mayer, por su parte, ha puesto en el foco la necesidad de visibilizar los puntos negros en la ciudad para las mujeres, aquellas zonas conflictivas en las que no se sienten seguras.

También ha destacado la necesidad de reflexionar sobre el modo de ocupar el espacio público y las diferencias por género o en relación al acceso a la vivienda, el transporte y la movilidad, aspecto en el que se ha avanzado mucho en los últimos años.