La decana del COAM aboga por desalojar infraviviendas y "entrar a saco" en Centro, que pide a gritos una revitalización

Actualizado: domingo, 15 julio 2007 13:25

Sobrini tacha de "impresentable" que los políticos traigan a "divinos extranjeros" con mejores condiciones que los arquitectos madrileños

El Colegio de Arquitectos ofrece su colaboración al proyecto olímpico para que Madrid adquiera proyección internacional y un sello propio

MADRID, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -

La decana del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid, Paloma Sobrini, abogó hoy por desalojar, y expropiar si es necesario las infraviviendas existentes aún hoy en el distrito Centro de la capital para emprender un ambicioso plan de rehabilitación.

A juicio de Sobrini, "la asignatura pendiente es la del Centro de Madrid", un barrio que debería ser reformado por "una administración que sea muy generosa porque no va a recoger los frutos en su mandato ni en el siguiente". "Es un proyecto largo, trabajoso y difícil. El casco antiguo de Madrid está pidiendo a gritos una revitalización", añadió.

En este sentido, en una entrevista concedida a Europa Press, apuntó que se han hecho actuaciones puntuales, "un centro de danza, arreglar un teatro o hacer una plaza como Torres Acosta", pero no se trata, a su juicio, de realizar "un rosario de intervenciones, sino de estructurar todo el centro y hacer unas intervenciones que tengan su razonamiento". "Hay que entrar en las manzanas, y entrar a saco", consideró.

En este sentido, dijo que deberían abordarse reformas integrales para acabar con las infraviviendas que todavía se encuentran en plena capital. "Entras en cualquier finca y hay un patio, y luego otro patio, y cuando llegas al final, hay viviendas -por llamarlas de alguna manera-- que no tienen agua corriente, que no tienen ventanas. Eso es inmoral y la Constitución garantiza a todos los ciudadanos una vivienda digna, no dice que sean propietarios de una vivienda digna", destacó.

"Todos esos espacios tienen que sanearse, tienen que esponjarse. El problema es que las personas mayores no quieren irse, pero las administraciones tienen que explicarles que tienen que irse de ahí porque es insalubre, que arbitren los mecanismos necesarios para revitalizar el Centro, con explicaciones, readaptaciones, etc...en fin, que pongan en marcha la máquina", consideró Sobrini.

Así, puso como ejemplo a París, donde al lado del Río Sena, en el denominado "village Saint Paul", se ha "esponjado el centro de la manzana, en la periferia se han arreglado los edificios respetando la fisonomía de la época, pero por dentro se ha liberado espacio". "Con ello se crea un espacio permeable, con calles nuevas, con puestos de segunda mano, cafeterías, bares, gente que toca música. Eso es limpiar y sacar el centro de las manzanas de la oscuridad, y hacer que la población participe de esos centros", explicó.

En Madrid en cambio "el Centro lo están rehabilitando los particulares, que no se han quedado quietos". "Si seguimos así en mil años habremos cambiado el centro, pero seguiremos teniendo infravivienda", añadió.

En este sentido, Sobrini apuntó que es preciso cambiar la normativa porque se impide crear pisos pequeños, "cuando la realidad es que nadie se va a la calle del Pez para buscar un piso de 100 m2". "Hay que empezar por flexibilizar muchísimo las ordenanzas, pero también las leyes. El Ayuntamiento ha intervenido en las ITE, pero eso es el punto uno, que sólo se refiere a seguridad, pero después hay otros siete puntos. Hay que seguir", estimó.

A su juicio, con el dinero gastado en la reforma de la M-30 se podrían haber rehabilitado 200 manzanas, es decir, casi la mitad de todo el centro, donde hay unas 160.00 viviendas en 450 manzanas. "El Ayuntamiento se ha comprometido a rehabilitar 40.000 viviendas, la cuarta parte del casco antiguo", subrayó. LAS CUATRO TORRES, UN HITO

A juicio de la decana, Madrid está ahora en un momento importante de cambios y oportunidades para recuperar el terreno que la distancia de Barcelona en cuanto a arquitectura y diseño. "Hasta ahora no era una ciudad vanguardista, pero está comenzando a cambiar, como lo prueba el cambio en el 'skyline'", expresó, al tiempo que celebró la construcción de las cuatro torres situadas en los antiguos terrenos de la ciudad deportiva del Real Madrid, que consideró "un hito en la ciudad".

"La torre más original en cuanto a piel es de unos arquitectos españoles", celebró, aunque advirtió que es preciso que se resuelva bien el problema de la accesibilidad a la zona, través de la Operación Chamartín y el nudo norte. "Hacía falta, porque toda ciudad necesita su icono, aunque eso no basta", agregó.

"Los catalanes han aprovechado todas las oportunidades para cambiar su ciudad, como es el caso de las olimpiadas, y lo que les quedó, se hizo con el Forum de las culturas. Nosotros tenemos ahora un proyecto olímpico que está empezando a pensarse, que puede ser la oportunidad", explicó.

"El primer proyecto olímpico fue una herencia de Alvarez del Manzano pero no era el ideal. Ahora es el momento en que el alcalde Alberto Ruiz Gallardón apueste fuerte por un proyecto olímpico que haga que Madrid cambie y que se proyecte internacionalmente, se estructure y tengamos un sello propio, que hasta ahora no tenemos".

"Se lo hemos dicho ya al alcalde, que estamos dispuestos a participar en todo. Él lo ha acogido con un gran interés y creo que podemos hacer algo importante", manifestó la decana del COAM, quien anunció que el COAM celebrará precisamente un debate para hablar del proyecto olímpico.

MACROQUEJA: "IMPRESENTABLE"

No obstante, la nueva decana del COAM apuntó que su "macroqueja" es la tendencia de las administraciones a fichar grandes arquitectos extranjeros para proyectos emblemáticos como la Ciudad de la Justicia. "Los arquitectos españoles, y los de Madrid, no tienen nada que envidiar a los arquitectos extranjeros. De hecho, nuestro nivel técnico y de preparación es muy bueno, está reconocido internacionalmente y no hay más que salir fuera de España para ver lo que están haciendo", remarcó.

"En igualdad de condiciones me parece bien que todo el mundo participe porque si no, nosotros no podríamos salir a trabajar. Ahora bien, me parece impresentable traer a divinos extranjeros en desigualdad de condiciones, por encima de los arquitectos de Madrid. Lo denunciaré siempre", remachó.

"Eso ha ocurrido en algunos casos, donde han pensado que así se apuesta sobre seguro. Está claro que un buen arquitecto, con un equipo potente, un 'divino', no te va a fallar, te va a hacer un buen edificio, lo que no está tan claro es que sea el mejor edifico. Y hay que buscar el mejor edificio, y apostar, no ir sobre seguro", agregó.

Para evitar que los proyectos se vayan al extranjero, el COAM ha creado una oficina de concursos para ayudar a las administraciones a convocar ofertas. "Será potenciada a través de un incremento de convenios para que todos ellos sean limpios, transparentes y participativos y que se acaben estas adjudicaciones a dedo que en el fondo crean iconos pero que al final nadie está satisfecho de ellos", planteó Sobrini.