Dos acusados de ser de Dominican Dont'Play piden su absolución al TS porque los testigos pertenecían a una banda rival

MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -

Dos acusados de pertenecer a la banda latina Dominican Don't Play han solicitado su absolución al Tribunal Supremo al entender que los testigos que les incriminaron eran "probablemente" miembros de una banda rival y que sus testimonios obedecieron a "motivos espurios".

Así lo ha manifestado la defensa de Macguive C.C. y a Milkis Alexander Carvajal en la vista que la Sala de lo Penal ha celebrado este miércoles para revisar la condena que la Audiencia Provincial de Madrid les impuso el pasado marzo por intentar asesinar en una reyerta a dos miembros de la banda Los Trinitarios.

A pesar de que fueron absueltos del delito de asociación ilícita, la Audiencia de Madrid condenó a Macguive a 21 años y cuatro meses de cárcel y a Milkis Alexander a 19 años y nueve meses de prisión por un delito de tenencia ilícita de armas, dos asesinatos en grado de tentativa y uno de lesiones.

La abogada de Macguive ha criticado que la condena por intento de asesinato se basó "única y exclusivamente" en una serie de "testigos perjudicados" cuyas declaraciones no fueron "coherentes ni constantes". Aunque no quedó probada la integración de su representado en Dominican Don't Play, sí ha hecho hincapié en que "probablemente esto fue una pelea entre bandas y los testigos pertenecieron a Los Trinitarios".

A su entender, tampoco se puede castigar a Macguive por tenencia ilícita de armas ya que la pistola nunca se le intervino y la pericial se practicó tan sólo en una de sus piezas. Asimismo, ha solicitado que el delito de lesiones sea considerado como una falta ya que la víctima no recibió tratamiento médico aunque el médico forense precisase en el juicio oral que hubiera sido "recomendable" para su curación.

"UN PULPO CON MUCHAS MANOS"

El abogado defensor de Milkis Alexander también ha pedido al alto tribunal que exculpe a su cliente basándose en la ausencia de pruebas que corroboren los testimonios de los testigos, quienes incurrieron en numerosas "contradicciones" y "cambios de parecer" a lo largo del proceso.

Tras exponer que Milkis Alexander sólo le reconoció una persona a lo largo de las "cuatro o cinco ruedas de reconocimiento practicadas", ha criticado que al acusado se le presentara como "un pulpo con muchas manos para meter golpes, propinar palizas, transportar armas o pasárselas al presunto agresor".

Tanto el fiscal como la acusación particular han reclamado la confirmación de la sentencia condenatoria puesto que los testigos reconocieron sin "ningún género de dudas" la participación de los condenados en los hechos y, por lo tanto su responsabilidad ha quedado acreditada.

Ambos han puesto de manifiesto que las balas que las víctimas recibieron demostraron que "había un arma", se trataba de una pistola de fogueo manipulada y fue empuñada por MacGuive.

La acusación particular ha señalado que Valentín M. M. estuvo a punto de perder la vida si no hubiera sido asistido inmediatamente y, aunque ha admitido que hubo contradicciones por parte de los testigos, ha defendido que éstas fueron "pequeñas" e "irrelevantes".

La Sala que estudiará este asunto ha estado integrada por magistrados Sánchez Melgar, Miguel Colmenero, Juan Ramón Berdugo y Joaquín Giménez y Luciano Varela, que asumirá la ponencia.

La Audiencia Provincial consideró probado que los condenados participaron en una pelea ocurrida en la discoteca Sucre, ubicada en la localidad madrileña de Alcobendas, y que en la reyerta se emplearon armas de fuego.

En el escrito de acusación, el fiscal relató que los procesados la emprendieron a tiros contra un grupo de miembros de otra banda, los Trinitarios, sobre las 6.11 horas del 17 de mayo de 2009 frente a la discoteca Sucre de Alcobendas.