MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Estación Sur de Autobuses acristalará y cerrará las dársenas para evitar que los pasajeros sufran las inclemencias del tiempo, ahorrará un tercio en sus consumos así como un 30 por ciento en la climatización y mejorará la zona comercial potenciando el pequeño comercio y la instalación de marcas de calidad.
Así lo han avanzado este viernes desde la estación, visitada por la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, y el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Diego Sanjuanbenito. A esas mejoras se sumarán el uso de tecnología LED de iluminación, algo que se hará por primera vez, la instalación de nueva señalética dinámica, disminuir la emisión de CO2 y cambios en el acceso de viajeros. Y es que ya no accederán directamente al autobús sino que sólo podrán entrar a la dársena mediante una tarjeta electrónica.
Los trabajos comenzarán la semana que viene y estarán concluidos a finales de 2014. El coste será de 5 millones de euros, aportados íntegramente por la empresa concesionaria, Avanza, y, como ha apostillado la alcaldesa, "sin repercusión alguna sobre el precio de los billetes".
En materia de accesibilidad se colocarán pavimentos para la orientación del recorrido, crear zonas específicas de descanso con elementos adaptados, se construirá una nueva rampa doble, se mejorarán los aseos para las personas con discapacidad y se instalarán ascensores accesibles.
Desde su inauguración en 1971, en la calle Canarias, hasta ahora, la Estación Sur de Autobuses ha vivido una profunda transformación que la ha convertido en la estación con mayor tráfico de España, con 1.500 destinos finales en España, y 500 más en Europa y Marruecos, a través de medio centenar de líneas de autobuses. Botella ha destacado los 7 millones de viajeros que la utilizaron el pasado año y los 15 millones que pasaron por ella.
La primera edil ha recordado tras la visita que más del 75 por ciento de la población de Madrid tiene una parada de autobús o entrada de Metro a menos de 300 metros.
