Gallardón celebra y apoya que la Delegación no autorice la procesión atea porque tenía "voluntad de provocación"

MADRID 14 Abr. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha asegurado este jueves que celebra y apoya que la Delegación de Gobierno haya decidido no autorizar la llamada procesión atea convocada para el Jueves Santo, porque considera que tenía "voluntad de provocación", al celebrarse "el mismo día, a la misma hora y en el mismo lugar" que las procesiones de Semana Santa.

El primer edil ha conocido la noticia sobre la decisión de la Delegación durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno de este jueves. "Me entero ahora mismo", ha afirmado y, tras leer un primer avance de la información, ha dicho: "Celebro y apoyo la resolución de la Delegación del Gobierno".

"Cuando se busca única y exclusivamente ejercer un derecho o alzar la voz no se entra en necesidad de conflicto con otros derechos y voces que se sabe que se producirán. Por tanto, creo que ha sido --y coincido con la Delegación-- la coincidencia en el tiempo y el espacio lo que permite calificar como provocación, como voluntad de conflicto, esta petición", ha señalado.

Además, ha puesto de relieve que la justificación de la Delegación de Gobierno para no autorizar la marcha --que "el lugar por el que pretenden los convocantes desarrollar la manifestación, curiosamente, presenta nombres relacionados con la simbología católica: el día elegido es Jueves Santo y la hora prevista que coincide con el comienzo de las procesiones católicas-- es la misma que aportó el Consistorio en el informe negativo en el que desaconsejaba otorgar el permiso.

"Nuestro informe fue negativo por eso, y lo habría sido exactamente igual si se hubiese solicitado un acto contradictorio con la manifestación de cualquier otra creencia religiosa o actividad de carácter social", ha insistido el regidor.

Así, ha concluido que, "al margen de las razones", es "una buena noticia" la decisión de la Delegación de Gobierno, y ha insistido en que "cuando se plantean, como había planteado, esta iniciativa con coincidencias de tiempo y de sitio no se puede alegar que lo que se pretende es el ejercicio de un derecho, porque ese derecho puede perfectamente ejercerse en otro tiempo y lugar".

"Pero cuando se pide que haya coincidencia de tiempo y sitio con una manifestación de carácter religioso de una confesión que ya se sabe cuál es su itinerario y horario, evidentemente se esta buscando una confrontación, y es obligación de las administraciones públicas evitarla. Por tanto, celebro la decisión de la Delegación", ha zanjado.