MADRID, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del Partido Socialista de Madrid (PSM), Tomás Gómez, ha afirmado este miércoles que en este momento hacen falta 300.000 euros para subvenciones a entidades de voluntariado en la Comunidad de Madrid, y ha reclamado coordinación a nivel autonómico pero también nacional.
"Ahora mismo hacen falta 300.000 euros para subvenciones a entidades de voluntariado en la Comunidad. Dicen la señora (Esperanza) Aguirre y su Gobierno que no lo hay. ¿No hay 300.000 euros cuando tenemos un Presupuesto de más de 17.000 millones de euros en esta Comunidad? No hay quien pueda creer que no hay 300.0000 euros para organizaciones que sostienen asuntos sociales muy importantes en esta comunidad", ha considerado el socialista en una visita al centro de acogida Juan Luis Vives de Vicálvaro, que tiene una capacidad para 132 sin techo, a pesar de que aumenta en estas épocas debido a la campaña del frío.
Gómez ha querido "poner en valor el trabajo y la aportación de miles de voluntarios" y ha destacado que "no hay recursos económicos" en este sector, ni "coordinación nacional" cuando la "problemática de los sin techo es algo que trasciende a un municipio".
Gómez ha apuntado que el Gobierno de la Comunidad de Madrid "no hace absolutamente nada" en la materia y ha asegurado que "no hay política autonómica en este sentido", cosa que quieren llevar al Parlamento autonómico.
Además, ha considerado que los voluntarios en Madrid "más voluntarios no podrían ser", ya que "no cuentan con ningún apoyo por parte de la administración autonómica".
En este sentido, ha apuntado que en la legislatura pasada el Grupo Parlamentario Socialista en la Asamblea de Madrid presentó una Proposición de Ley (PROPL) para dar un "estatus" y establecer unas "normas de funcionamiento" a este sector pero fue rechazada "con la mayoría absoluta del PP".
Ya en el centro, ha indicado que tienen un "problema" de acceso del transporte, y ha apuntado que "los usuarios tienen dificultades para llegar en transporte público".
Jorge, un usuario de 45 años que lleva ya dos años en el Juan Luis Vives, ha explicado que le han ayudado "muchísimo", ya que él llegó "como un guiñapo, súper dormido" y durmiéndose todo el día. Está tomando metadona pero está rebajando la dosis ya que quiere dejar de tomarla.
"Aquí tengo gente con la que hablar, reírme, pasármelo bien, con la que olvidarme de la droga, que es lo fundamental", ha explicado y ha destacado que en el centro tiene "cama, comida, amigos, gente con la que reirte, pasártelo bien y que no quiere saber nada de la droga".
