MADRID, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSM, Tomás Gómez, ha afirmado este viernes en un mitin en el distrito de Fuencarral que los "insultos" del PP en las instituciones "se convierten en pedradas contra las caravanas electorales del PSOE" después de que tres coches que hacían campaña a favor de Alfredo Pérez Rubalcaba fueron apedreados esta semana en las inmediaciones de la plaza de Ventas.
Acompañado por el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzly, y por la número siete en la lista del PSOE por Madrid y presidenta del PSM, Delia Blanco, Tomás Gómez se ha dirigido a un auditorio de unas 300 personas para señalar que la esencia de los 'populares' es "el insulto y la descalificación personal" y que esa actitud degenera en las "pedradas contra la caravana socialista por parte de los fascistas del PP".
Gómez ha asegurado que los 'populares' van contra el PSOE y contra toda la socialdemocracia europea. "Hay toda una campaña estructurada para acabar con la socialdemocracia europea, eso es lo que nos jugamos el 20 de noviembre, no sólo quién gobierna durante cuatro años", ha defendido. En este punto, el diputado ha destacado que el PSOE "fue fundado por Pablo Iglesias y 25 trabajadores" mientras que el PP fue constituido por "un grupo de exministros de Franco". A eso ha sumado que la derecha europea está integrada por "los hijos de Margaret Thatcher y Ronald Reagan, que lo que quieren es acabar con el Estado del Bienestar".
"No hay ideología detrás (de la derecha) sino negocio y el PP no es más que el brazo político de los poderes económicos, de la CEOE y de la CEIM", ha remachado el socialista después de afirmar que el presidente de los empresarios madrileños, Arturo Fernández, no es más que "el consejero número nueve de Esperanza Aguirre".
Por último, Tomás Gómez ha destacado que el 20 de noviembre está en juego la libertad, que sólo se puede conseguir a partir de la igualdad y cuando no hay miedo. Esa igualdad ha dicho que no está presente ni en la Asamblea de Madrid ya que la ratio de títulos nobiliarios en la bancada 'popular' es del 33 por ciento cuando en el país el porcentaje es del 0,06 por ciento.
"La seguridad no es sólo para que no te roben sino que es acabrr con el miedo a caer enfermo porque sabes que tienes un sistema que te saca adelante, es acabar con el miedo sabiendo que la educación de los hijos no depende de lo que tengas. El miedo es el peor carcelero", ha concluido.
EL LABORATORIO DE MADRID
Por su parte, el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, ha afirmado que la región se ha convertido en una especie de "laboratorio" donde lo que se hace es "calentar" en exceso a la sociedad haciendo que, al final, "vaya a acabar saltando todo por los aires, rompiendo la sociedad", lo que significa dañar "los pilares del Estado de Bienestar".
Esa "explosión" que derivará en "mayores brechas sociales", tiene como precursores a los responsables del PP, como su candidato, Mariano Rajoy, definido por Lissavetzky como una persona que "no da confianza a la gente pero que sabe leer muy bien", en referencia a su intervención en el debate televisado del pasado lunes que le enfrentó a Alfredo Rubalcaba.
Del candidato socialista, amigo de Lissavetzky desde la infancia, el portavoz en el Ayuntamiento ha dicho que es un hombre con valores como "el compromiso, el orgullo y la humildad al reconocer algún error que se haya podido cometer". "Alfredo Pérez Rubalcaba tiene neuronas y hormonas, vamos a llamarlo valentía", ha manifestado.
Durante su intervención ha recordado algunas de las propuestas de Rubalcaba, como la creación de un impuesto para las grandes rentas, una tasa para las transacciones financieras y una subida del IVA para el tabaco y las bebidas de alta graduación, iniciativas que se unen a apuestas por las energías renovables. Lissavetzky ha dicho sobre esta última cuestión que si el fundador del PSOE, Pablo Iglesias, levantara la cabeza y echara un vistazo al programa electoral del PSOE posiblemente no entendería este tipo de cuestiones pero sí reconocería el "código genético" de los socialistas. "Están esos valores y tienen un nombre, so-cia-lis-mo", ha concluido.
A su vez, la presidenta del PSM, Delia Blanco, ha confesado que algunas de las medidas votadas en el Congreso les "dolieron en el alma" sabiendo cuando las votaron que era algo muy "duro" ya que afectan a los trabajadores pero que hubo que hacerlo para evitar llegar a situaciones como las de Grecia o Portugal, con gobiernos socialistas, donde los ejecutivos "han sido intervenidos y abatidos". "En una Europa de 27 el único reducto socialista que queda somos nosotros", ha afirmado tras pedir el voto para Rubalcaba.