Lissavetzky propone un plan contra la exclusión social porque Botella "se está lavando las manos" ante este problema

Lissavetzky este miércoles en el Pleno del Ayuntamiento de Madrid
CEDIDA POR EL PSM
Europa Press Madrid
Actualizado: miércoles, 3 julio 2013 16:24

MADRID 3 Jul. (EUROPA PRESS) -

El portavoz del grupo municipal socialista, Jaime Lissavetzky, ha defendido la necesidad de aplicar un plan de lucha contra la exclusión social para tratar de solucionar la situación de "emergencia" que padece los sectores más vulnerables de la ciudad, dado que a su juicio la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, "se está lavando las manos como Poncio Pilatos" ante este problema.

En su opinión, la alcaldesa de Madrid "mira para otro lado" ante las situaciones de exclusión social y prefiere estar "en el olimpo" (en referencia a la candidatura de Madrid 2020). "No queremos sólo una alcaldesa de fotos, sonrisas y Juegos Olímpicos", ha remarcado Lissavetzky para remarcar que se puede defender la candidatura olímpica y a la vez actuar contra las situaciones de emergencia social.

Así lo ha indicado este miércoles en rueda de prensa tras mantener una reunión con los concejales socialistas que forman parte de la Comisión de Familia y Servicios Sociales (Pedro Zerolo, Ana de Sande, Marisa Ybarra y Carmen Sánchez Carazo) y dónde ha expuesto toda una serie de indicadores para ilustrar la "preocupación" del PSOE por las situaciones crecientes de exclusión social.

Concretamente, ha manifestado que, pese a lo que dice el Ayuntamiento de Madrid sobre casos puntuales de desnutrición infantil, el 27 por ciento de los menores de 16 años de la ciudad viven en el umbral de la pobreza. "No quiero exagerar pero es un escándalo que haya niños que cojan lo que sobra del supermercado", ha apuntado luego.

DATOS SOBRE SITUACIONES DE EXCLUSIÓN

En este sentido, Lissavetzky ha manifestado que dos de cada cinco familias de Madrid tienen dificultades para llegar a fin de mes y el 27 por ciento de la población (1,3 millones de madrileños) se encuentran en situación de vulnerabilidad, datos que ha recopilado de Cruz Roja.

Aparte, ha añadido que la tasa de exclusión social en la ciudad es del 18,6 por ciento y que más del 46 por ciento están en un estado anterior a la vulnerabilidad, datos que vienen recogidos en el último informe de la Fundación Foessa.

Además, ha aseverado que las solicitudes de Renta Mínima de Inserción se incrementan al mes en Madrid en torno al 200 por ciento mientras que se ha producido una reducción considerable de las prestaciones junto a un incremento de trabas burocráticas. Unido a ello, Lissavetzky ha aseverado que en la capital 18 familias se quedan sin vivienda al día.

Por otro lado, el portavoz socialista ha aseverado que, pese al último dato positivo de paro, ocho distritos y 44 barrios de Madrid presentan una tasa de desempleo superior a la media de la Comunidad de Madrid. "La emergencia social requiere soluciones", ha apostillado luego.

Con esta 'batería' de datos, Lissavetzky considera que es "razonable" la aplicación de un plan de lucha contra la exclusión social y para ello plantea una serie de medidas para lograr más financiación para afrontar estas situaciones.

BOTELLA DEBE DEDICAR EL SUPERÁVIT A LA ACTUACIÓN SOCIAL

Concretamente, el portavoz municipal del PSOE ha reclamado a Botella que destine "gran parte" del superávit que se alcanzó en 2012 (841 millones de euros) "para atender a los ciudadanos y no sólo a los bancos", priorizando así a los sectores en situación de emergencia social.

Por otro lado, ha exigido al equipo de Gobierno municipal que consuma todas las partidas presupuestarias dedicadas al aspecto social puesto que, en 2012 y según sus datos, no se ejecutaron al completo todos los fondos destinados. "Es vergonzoso como poco", ha espetado Lissavetzky.

Aparte, ha propuesto la posibilidad de solicitar fondos europeos para financiar programas contra la exclusión social y ha puesto como ejemplo que de los 100.000 millones de euros que se planearon para ayudar al sector bancario nacional sólo se han utilizado 44.000 millones.

Finalmente, Lissavetzky ha exigido que el Ayuntamiento reclame al Gobierno central que financie con dotación suficiente el Plan Concertado de Servicios Sociales y los planes contra la exclusión social.

En su opinión, el Consistorio hace "dejación de responsabilidades" al descargar en el tercer sector social la mayor parte de la intervención social. "Hay dejación de funciones", ha criticado el edil socialista para reclamar, por ejemplo, un plan de choque para el desempleo y más escuelas infantiles de carácter público.

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