MADRID, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Comunidad de Madrid cuenta en la actualidad con un total de 132 aulas de enlace en región para alrededor de 1.600 alumnos, incrementándose durante este curso debido a la llegada de alumnos ucranianos debido a la invasión de Rusia que ha cumplido esta semana su primer año.
Según han informado a Europa Press fuentes de la Consejería de Educación y Universidades, el curso 2021/22 comenzó con cerca de 80 aulas de estas aulas y alrededor de 1.000 plazas. Estas aulas acogen a estudiantes extranjeros desde los 9 hasta los 16 años con el objetivo de que se puedan integrar si presentan carencias en el conocimiento de la lengua.
En el caso de los niños ucranianos que han venido por la guerra, han afirmado que el Ejecutivo autonómico prioriza su escolarización en los colegios e institutos bilingües, ya que "a la mayoría les resulta más fácil comunicarse en inglés que en español".
Asimismo, la Comunidad de Madrid indicó esta semana que se ha atendido en este año a 17.681 refugiados ucranianos, el 37,1% de ellos niños, ha escolarizado a más de 6.000 alumnos y ha facilitado 16.102 tarjetas sanitarias.
Entre otras medidas, la Comunidad de Madrid también cuenta con el Servicio de Apoyo Itinerante al Alumnado Inmigrante (SAI), que presta asesoramiento y apoyo a los centros educativos que cuentan con estudiantes extranjeros de reciente incorporación y con desconocimiento del español.
El Ejecutivo madrileño facilitó a asociaciones ucranianas para que durante los fines de semana pudieran utilizar cuatro centros educativos públicos con el fin de impartir clases de Lengua, Literatura, Geografía e Historia de su país, además de incidir en la mejora y el aprendizaje de castellano.
CCOO PIDE QUE SE ATIENDAN LAS NECESIDADES EDUCATIVAS
Por su parte, la Federación de Enseñanza CC.OO. Madrid cifró en un 85% el número de colegios madrileños que tienen alumnos ucranianos y no disponen de aula enlace.
La secretaria general de la Federación, Isabel Galvín, ha hecho un llamamiento al Gobierno madrileño para que "atienda de forma urgente todas las necesidades educativas de los 6.082 alumnos ucranianos refugiados" que están escolarizados en centros educativos de la región.
"La llegada de refugiados hubiera requerido de una respuesta estable, seria y organizada, basada en la empatía y en la solidaridad, pero, sobre todo, en garantizar el derecho a la educación de estos niños y jóvenes", señaló Galvín, según recogió el sindicato en un comunicado.
En concreto, alertó de que las aulas de enlace sufrieron "un recorte drástico: de las 171 aulas de enlace públicas que funcionaban hace 15 años sólo quedaban 29 abiertas, en febrero del 2022".
