Más Madrid lamenta que pabellones de Casa de Campo sigan cerrados por "alergia del Ayuntamiento al movimiento vecinal"

Campus del Asociacionismo de Madrid
Campus del Asociacionismo de Madrid - EUROPA PRESS
Publicado: jueves, 16 julio 2020 9:17

"No saben qué hacer, lo único que saben que no quieren hacer es que se ceda a las asociaciones", lanza Murgui sobre los cuatro edificios inicialmente destinados al Campus Asociativo

MADRID, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -

El concejal de Más Madrid Nacho Murgui ha vaticinado que los pabellones de la Casa de Campo Icona I y II, Ministerio de Vivienda y Valencia volverán a verse cerrados, tras años acumulando abandono, "simplemente porque el Ayuntamiento tiene alergia al movimiento vecinal".

El anterior Gobierno impulsó en el mandato pasado el Campus Asociativo de Madrid, a levantar en cuatro pabellones que llevaban sumando años de cierre y vandalismo: Valencia (con zonas de reunión y creación, que incluiría la escuela de formación del Campus, despachos, almacén, sala de comunicación, de formación y coworking, además de la sede del centro de recursos del asociacionismo CRAS!), Icona II (con café teatro, centro social, cafetería y taquillas), Ministerio de la Vivienda (sedes sociales, servicio de asesoramiento, aulas de formación, salas de reunión y administración) e Icona I (con zona de servicios comunes dedicados a exposiciones, biblioteca técnica y espacio sociocultural).

Las obras, indica Murgui a Europa Press, tenían que haber terminado en junio de este año, fecha para la que deberían estar tramitados todos los contratos necesarios para poner los edificios en marcha.

Si bien los trabajos en Icona I, el edificio con menor superficie, finalizaron hace dos semanas, el 30 de junio, las obras de rehabilitación de Icona II no han finalizado sino que lo harán en agosto, como detalló el coordinador de Cultura, Jorge Breta, esta misma semana en la comisión del área sobre los dos inmuebles que competen a su departamento.

Además del retraso en las obras y la necesaria contratación vinculada para ponerlos en marcha pesa sobre los cuatro edificios el hecho de que el área de Coordinación Territorial, con Silvia Saavedra (Cs) al frente, aún no haya decidido el uso final que se les dará. Fuentes del área trasladaron a Europa Press que será en septiembre cuando se dé a conocer el destino final.

Ya en la comisión del pasado octubre, la directora general de Participación Ciudadana, Sara Aranda, contestaba a Más Madrid que los cuatro pabellones de la Casa de Campo no se dedicarán al asociacionismo, como estaba inicialmente previsto en el plan de obras firmado e iniciado por el anterior Gobierno, porque este objeto ya se está fomentando "en otros espacios".

La Covid-19 ha llegado para cambiarlo todo, también las demandas de las asociaciones, que reclaman más ayuda institucional para continuar con su labor solidaria al frente de las despensas solidarias que están paliando las 'colas del hambre' de Madrid dando de comer y ofreciendo productos de primera necesidad a unas 50.000 personas, según datos de la Federación Regional de Vecinos de Madrid (FRAVM).

Nacho Murgui ha puesto de relieve el papel de las asociaciones vecinales en estos meses para el funcionamiento de la ciudad, "llegando donde la Administración no ha sido capaz" y a pesar de "las enormes dificultades que ha puesto el Ayuntamiento para que esta labor se desarrollara en condiciones óptimas porque han llegado a cuestionar la continuidad de los locales".

El concejal de Más Madrid se refiere al Palomar, sede de la asociación de vecinos de Montecarmelo y punto de reparto de su despensa solidaria, o a la Casa del Cura, en Malasaña, donde han retirado la cesión vecinal para destinar el inmueble a otros fines. Lo mismo sucederá con la que iba a ser la Casa de las Asociaciones de Hortaleza.

"OFENSIVA CONTRA ESPACIOS CEDIDOS" A LA CIUDADANÍA "POR MANDATO DE VOX"

"Han desatado una verdadera ofensiva contra estos espacios cedidos y, por lo tanto, contra la actividad del movimiento vecinal", ha analizado Murgui, que ha incluido dentro de esa ofensiva la modificación de lo que era el proyecto de recuperación de los edificios de la Casa de Campo destinados en origen al Campus Asociativo.

"El actual equipo de Gobierno lo único que ha hecho ha sido eliminar ese destino porque no saben lo que van a hacer. Lo único que saben que no quieren hacer es que se ceda a las asociaciones", ha declarado el edil.

Tiene claro que responde "a un mandato de Vox, que está encabezando esa ofensiva contra las asociaciones". "Son los socios más radicales los que señalan contra quién tiene que ir dirigida la acción de gobierno y en este caso Cs, los encargados del área, son quienes ejecutan las decisiones e instrucciones que les dan sus socios de la extrema derecha. Es significativo que sepan que no se lo quieren dar a las asociaciones pero que no sepan aún para qué lo quieren utilizar", ha manifestado Murgui.

El concejal de Vox en el Ayuntamiento de Madrid Fernando Martínez Vidal declaró en la última comisión de Cultura que el movimiento asociativo "debe estar en las calles", en sus barrios, y no en los pabellones de la Casa de Campo "haciendo política". "Las asociaciones deben estar en sus barrios, no en la Casa de Campo, donde se alejarían de la realidad de sus barrios para acercarse a movimientos políticos curiosamente escorados a la izquierda", remataba.

El fomento del asociacionismo no consiguió el consenso unánime necesario para ser incluido en los Pactos de la Villa. "Una de nuestras posiciones a lo largo de las negociaciones ha sido la importancia del tejido asociativo, el reconocimiento de los movimientos ciudadanos pero parte de los partidos de la derecha se han negado a reconocer su importancia. No renunciamos y seguimos trabajando", ha asegurado el edil de Más Madrid.

INSTITUCIONES "QUE TEMEN A LA GENTE"

Para Murgui, el hecho de que "unas instituciones no reconozcan ni apoyen a vecinos y vecinas que se comprometen con su ciudad y con el bien común son unas instituciones que tienen un entendimiento de la democracia bastante limitado y que temen a la gente en lugar de darle cauce y de acogerla, colaborar y cooperar con ella".

El Campus del Asociacionismo de Madrid planteado en la pasada legislatura seguía la estela de ciudades como Barcelona, Coslada, Rivas, Oviedo, París o Marsella. Demanda del Consejo de Asociaciones de Madrid, el entonces área de Coordinación Territorial fijó en 9 millones de euros en el presupuesto de 2019 la rehabilitación, a ejecutar por Madrid Destino. El proyecto contaba con las preceptivas autorizaciones al tratarse de un BIC.

Sus espacios y servicios estarían abiertos a todas las entidades inscritas en el Censo Municipal de Entidades y Colectivos Ciudadanos. El entonces delegado del ramo, Nacho Murgui, defendía este proyecto que "destina recursos y crea políticas públicas para apoyar y a consolidar uno de los más valiosos capitales de la ciudad, el tejido ciudadano que articula y da cauce a la solidaridad y la cooperación para construir el bien común".

Leer más acerca de: