MADRID, 28 Mar. (EUROPA PRESS) -
Metro de Madrid hará una evaluación de cada caso particular del trabajador que solicite tener una mascarilla de protección a la hora de decidir si se concede o no, dado que múltiples mediciones ambientales confirman que "no hay riesgo" de exposición a amianto.
Fuentes de la compañía han indicado a Europa Press que en el protocolo de actuación para la retirada del amianto que se gestó el año pasado recogía que si el personal de Metro lo consideraba oportuno, la compañía le proporcionaba una.
Era una medida, según las mismas fuentes, pensada para "mitigar inquietudes de los trabajadores" sobre este material y "no por ningún riesgo" de exposición a amianto, que no ha habido antes en la empresa ni existe actualmente, en alusión al encapsulado y se está procediendo a un progresivo desamiantado.
Aparte, desde Metro explican que se han realizado ya muchas mediciones ambientales en las instalaciones del suburbano y todas ellas han dado negativo.
Por todo ello, la compañía ha optado por analizar caso por caso las solicitudes de uso de mascarilla que se cursen y, en función de ello, decidirán si se da o no, pues se ha confirmado que no hay riesgo de exposición al amianto, ni lo había con anterioridad, para trabajadores y usuarios.
No opinan igual los sindicatos que han criticado este cambio de criterio de Metro. De hecho, CCOO ha tildado de "último despropósito" por parte de la Dirección de Metro la "prohibición" de uso de mascarillas a personal de estaciones y trenes pese a reconocer la presencia del material en instalaciones y trenes.
Para ello, según censura el sindicato, Metro argumenta que sus mediciones medioambientales "están por debajo de un posible riesgo".