Archivo - Medialab Prado
Archivo - Medialab Prado - EUROPA PRESS - Archivo
Publicado: domingo, 14 marzo 2021 18:03


Más de 300 arquitectos rechazan el traslado de Medialab-Prado a Matadero

MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -

El equipo de Medialab-Prado será reubicado en Matadero desde este miércoles, aunque la antigua Serrería Belga podría seguir acogiendo eventos ya programados debido a la falta de espacio en el nuevo emplazamiento y a que algunas actividades están diseñadas 'ad-hoc'.

Así lo han avanzado a Europa Press trabajadores de Medialab-Prado, a los que el pasado miércoles les han comunicado que en una semana pasarán a desempeñar su puesto de trabajo en Matadero Madrid Centro de Creación Contemporánea.

Según las citadas fuentes, todas las actividades que ya están programadas por Medialab-Prado se van a llevar a cabo, aunque todavía queda por cerrar el espacio donde se van a desarrollar.

Por otro lado, la programación se extiende hasta junio y el actual equipo de Medialab-Prado no puede programar a partir de ese momento, ya que posteriormente se convocará un concurso público para elegir al responsable comisarial.

Para el equipo actual, lo fundamental es que se mantenga el proyecto de Medialab-Prado, y creen que el hecho de que vaya a sacarse a concurso significa la desaparición del mismo, basado en la participación ciudadana.

Por su parte, desde el Ayuntamiento de Madrid aseguran que "el proyecto Medialab no desaparece, únicamente cambia de ubicación, al sur de la almendra central, a Matadero, uno de los espacios más destacados y valorados del panorama cultural madrileño".

Asimismo, destacan que "se mantiene toda la plantilla de trabajadores", y que en el nuevo emplazamiento "ganará opciones de desarrollo, además de facilitar sinergias con otros espacios como Intermediae y todo el ecosistema de Matadero".

En cuanto a Alameda 15, según los plantes del Ayuntamiento, acogerá en unos meses el Espacio Cultural Serrería Belga, en el que "una parte será expositiva", con fondos del Museo de Arte Contemporáneo y un hub.

ARQUITECTOS CONTRA EL TRASLADO

Por otro lado, desde la arquitectura madrileña, más de 300 profesionales objetan, según una carta abierta, que la salida de Medialab-Prado del edificio de la Serrería Belga y la adecuación para el uso museístico propuesto implicarían "la pérdida de la integridad de Medialab-Prado como obra original", así como "poner en riesgo el valor patrimonial arquitectónico contemporáneo de la Serrería Belga".

Respecto a la integridad de Medialab-Prado argumentan que "sus arquitectos desarrollaron un programa de usos ad-hoc a las necesidades de la institución, un proyecto arquitectónico integral y complejo, y dirigido su ejecución".

Advierten que "un cambio de uso innecesario implicaría necesariamente la realización de alteraciones de carácter esencial al proyecto, no solo de carácter formal sino de concepto".

En concreto, explican que "la transformación del edificio en un espacio museístico conllevaría cambios profundos en su programa funcional y formal, que afectarían tanto a la distribución de los espacios y elementos interiores del mismo, como a su imagen y fachada para controlar las condiciones museísticas de la exposición de las obras o circulaciones".

En cuanto al valor patrimonial de la Serrería Belga, destacan que "es un ejemplo singular de lo que fueron los primeros edificios de hormigón armado en Madrid", que "posee un valor excepcional por el trabajo original e innovador con este material".

Además, agregan que "es uno de los pocos edificios de esta naturaleza que pueden ser visitados, requiriendo proteger su valioso interior".

"Cualquier obra destinada a ocultar su estructura de hormigón sería una agresión contra el patrimonio histórico industrial, siendo este un caso singular en la ciudad de Madrid", destacan.

Otra de las características de la Serrería Belga es que se trata de un edificio pensado para una artesanía manual y por lo tanto "extremadamente luminoso, casi el 60 por ciento de su fachada son huecos".

"Su diseño es una virtud y una de las cualidades singulares del edificio. Acabar con la transparencia de las fachadas acristaladas iría en contra de la protección del edificio y de su carácter urbano", apuntan, para advertir de que "cualquier esfuerzo por convertirlo en una caja blanca anularía su valor patrimonial".

Y es que "una sala expositiva convencional requiere de un alto control de las condiciones lumínicas y las condiciones de la infraestructura de la Serrería Belga son las opuestas a las de una pinacoteca", avisan sobre el plan de trasladar obras del Museo de Arte Contemporáneo.

Los arquitectos recuerdan también que "Medialab-Prado es una institución singular con unos requisitos espaciales, funcionales y tecnológicos que en su anterior traslado requirieron de un proceso de materialización de 6 años", por lo que consideran que "no es realista que la Serrería Belga pueda transformarse en pocos meses para devenir un museo", como "tampoco lo es que Medialab-Prado pueda disponer en tan poco tiempo de un espacio en Matadero con las condiciones arquitectónicas necesarias para desarrollar su actividad actual".

Entre los firmantes se encuentran arquitectos como el exdecano del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid José María Ezquiaga Domínguez; Iñaqui Abalos, Juan Navarro Baldeweg, Juan Herreros, Emilio Tuñón y Belén Moneo.

El Área de Cultura del Ayuntamiento ha respondido a la carta manifestando "respeto absoluto a las distintas opiniones respecto a la integración del proyecto Medialab en Matadero".

"No se harán obras estructurales de Alameda 15, solo habrá una adecuación de espacios", aseguran.

Por otro lado, alegan que Medialab-Prado es un proyecto que nació en Conde Duque, no en su ubicación actual, y que "la propia naturaleza del mismo le aleja de cualquier consideración de que sea un proyecto estanco, ya que una de sus virtudes es que puede desarrollarse en entornos muy dispares".

Otro manifiesto del ámbito académico destaca el lugar "tan especial" que Medialab-Prado ocupa en el ecosistema académico, y manifiesta que "el desmantelamiento y traslado del centro socava años de trabajo, complicidad y aprendizaje entre muy distintas comunidades de investigación".

"Un Madrid sin Medialab-Prado es un Madrid empobrecido académicamente", concluyen más de 200 firmantes vinculados a instituciones académicas nacionales e internacionales.