El nuevo auditorio del Centro Cultural Eduardo Úrculo de Tetuán homenajeará a Joaquín Rodrigo

Actualizado: miércoles, 12 enero 2011 13:20

VALENCIA, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Centro Cultural Eduardo Úrculo del distrito madrileño de Tetuán ha decidido bautizar su auditorio con el nombre de Joaquín Rodrigo, en homenaje al gran compositor saguntino, que durante casi 25 años vivió en el barrio.

El acto de 'bautismo' del auditorio tendrá lugar este jueves a las 19 horas en ese mismo espacio, ubicado en la Plaza Donoso, 5, según ha informado la SGAE en un comunicado.

Con este motivo, la pianista Ana Benavides ofrecerá un recital de piano --bajo el título 'El piano de Joaquín Rodrigo y sus contemporáneos'--, ilustrado con palabras de Cecilia Rodrigo, hija del maestro.

Además, se inaugurará la exposición 'Joaquín Rodrigo en Madrid (1939.1999). Apuntes de la vida de un genio', realizada por Javier Suárez Pajares y se proyectará 'Música para un jardín', un cortometraje dedicado al madrileño parque del Retiro, con música del compositor saguntino. Previamente, se descubrirá una placa con el nombre del auditorio.

El Centro Cultural Eduardo Úrculo, gestionado por el Ayuntamiento de Madrid, está situado en el madrileño distrito de Tetuán, en el que residieron en compositor y su esposa entre 1975 y 1999.

Joaquín Rodrigo nace en Sagunto (Valencia) el 22 de noviembre de 1901, día de Santa Cecilia, patrona de la Música. A los tres años de edad, pierde la vista como consecuencia de una epidemia de difteria. A los ocho años inicia, en Valencia, los estudios musicales de solfeo, violín y piano. Después, armonía y composición con los maestros Francisco Antich, Enrique Gomá y Eduardo Chavarri.

Sus primeras composiciones datan de 1923. En 1927, se traslada a París e ingresa en la Escuela Normal de Música para estudiar composición con Paul Dukas, quien demuestra una especial predilección hacia su discípulo.

Pronto se da a conocer como pianista y compositor en los ambientes musicales parisinos y entabla amistad con Ravel, Milhaud, Honneger, Stravinski y Manuel de Falla. En 1940 tiene lugar en Barcelona el estreno mundial del Concierto de Aranjuez para guitarra y orquesta, primera de sus obras que le daría fama universal y claro ejemplo de su personalidad.