La oposición tilda de "ley de la caverna" y de "inservible" la LOMCE y el PP cree que la reforma es "una necesidad

MADRID 24 Oct. (EUROPA PRESS) -

Los grupos parlamentarios de la oposición en la Asamblea de Madrid han respaldado la huelga educativa convocada para este jueves contra la LOMCE, que han tildado de "ley de la caverna" e "inservible"; mientras que el PP ha defendido que la reforma es "una necesidad".

Además, el portavoz del PP en la Asamblea, Íñigo Henríquez de Luna, ha dicho que respetan el derecho de huelga, pero esperan que "en ese ejercicio de un derecho democrático se haga por la vía pacífica y se respete el derecho de los estudiantes que quieren ir a sus universidades, colegios o institutos".

En declaraciones a los medios en la Asamblea de Madrid, el portavoz adjunto del PSOE en la Cámara José Quintana ha mostrado su apoyo a la huelga y a la manifestación convocada para esta tarde contra la LOMCE, una ley que "reduce de forma sustancial las becas".

Además, ha denunciado que en Madrid se está trabajando "en favor de la escuela concertada y privada" y "se ha abandonado la escuela pública".

El portavoz de IU, Gregorio Gordo, ha considerado que la huelga y la manifestación son cosas que deberían "hacer reflexionar" al ministro del ramo, José Ignacio Wert, que ha conseguido "el mayor consenso en la historia de la democracia española", ya que "todo el mundo está contra una ley que es segregadora, clasista y la ley de la caverna".

Por su parte, el portavoz de UPyD, Luis de Velasco, ha dicho que ven "justificada" la huelga y la manifestación porque "la gente está enfadada". Además, ha remarcado que su grupo votó en contra de la 'Ley Wert' en el Congreso de los Diputados al considerar que es "absolutamente inservible".

Por su parte, el portavoz del PP ha señalado que la reforma educativa en España "es una absoluta prioridad" y ha destacado que "España no está para huelgas". Sin embargo, sí ha apuntado que "hay unas residencias al cambio, un inmovilismo por parte de la izquierda política lacerante".

Así, ha defendido que "la reforma es una necesidad" aunque es "imposible contentar a todos los sectores sociales", ya que "siempre hay un miedo al cambio y un inmovilismo que al final lo que defiende son intereses corporativos", pero las reformas "tienen que defender el interés general de los ciudadanos".