MADRID 24 Ago. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Cultura, Turismo y Deporte de la Comunidad de Madrid, Mariano de Paco Serrano, ha llamado este sábado a no criminalizar a los menores no acompañados tras el arresto de un 'mena' en Villalbilla como presunto autor de la agresión sexual a una vecina de 14 años y las protestas vecinales.
"Lo que no podemos hacer es criminalizar a los menores no acompañados. Hay que criminalizar a los criminales, hay que criminalizar a los delincuentes y hay que hacer todas las pesquisas necesarias para ver quién ha cometido el delito", ha defendido el consejero.
El Ayuntamiento de la localidad ha confirmado que los menores extranjeros no acompañados que residían en un chalé tutelado situado en una calle de la localidad han sido trasladados a otro municipio tras los incidentes que supuestamente han protagonizado esta semana, y las posteriores protestas vecinales.
En declaraciones a los medios durante una visita las obras de restauración que se están realizando en la Iglesia de San Millán y San Cayetano, el consejero madrileño ha lanzado un llamamiento a la "prudencia" para evitar nuevos incidentes y ha insistido en la necesidad de no criminalizar a los menores no acompañados e inmigrantes y "desatar todas las acciones necesarias de la justicia y de la ley contra los criminales".
"Lo que tenemos que hacer es investigar, y el Estado de Derecho está para eso y las leyes están para eso, sobre cuáles han sido los autores materiales de los presuntos delitos, pero no criminalizar a los colectivos", ha subrayado.
Finalmente, el consejero ha condenado "todo tipo de agresión sobre la mujer y mucho más si se trata de una mujer menor de edad como parece esta presunta agresión".
Los hechos ocurrieron el pasado martes. Al parecer, varios 'menas' empezaron a molestar y acosar sexualmente a esta menor, que terminó recibiendo tocamientos y chupetones. Su familia interpuso una denuncia ante la Guardia Civil, que detuvo al día siguiente a un ciudadano magrebí de 17 años.
Tras la declaración en el cuartel, pasó a manos de la Fiscalía de Menores, que le dejó en libertad con cargos, pero trasladándole de casa de acogida y de localidad.