Policías Municipales afirman cobrar 1.668 € netos al mes y arremeten contra los sueldos de altos cargos del Ayuntamiento

Actualizado: lunes, 19 octubre 2009 17:56

MADRID, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -

Los sindicatos de la Policía Municipal de Madrid afirmaron hoy que el número de altos cargos de libre designación se ha triplicado en los últimos seis años, con un incremento del gastos en 28 millones de euros, mientras que el sueldo medio neto de un agente municipal recién incorporado es de 1.668,23 euros.

Las principales centrales sindicales del Cuerpo de Seguridad respondieron con estas cifras a algunos argumentos dados por el Ayuntamiento de Madrid sobre los motivos del conflicto laboral que enfrenta a ambas partes desde hace varias semanas por el nuevo convenio colectivo.

"Las declaraciones vertidas por los gestores del Área de Seguridad y Movilidad la semana pasada demuestran una tremenda irresponsabilidad, intentando crear una imagen distorsionada de la realidad del Cuerpo de Policía Municipal, su funcionamiento y las reivindicaciones de sus trabajadores, así como de la marcha de la 'negociación' que se está llevando a cabo con este colectivo", manifestaron.

Así, los sindicalistas acusaron al Consistorio de "mala gestión" que, en su opinión, "se traduce en desorbitados gastos en horas extraordinarias, con más de 54 millones de euros gastados desde 2004, junto con el dispendio económico de alquiler de edificios --400.000 euros mensuales la Jefatura de la Policía, el contrato de alquiler de vehículos de lujo del alcalde --591.624 euros-- y la subida del sueldo en un 11,7 por ciento de 103 altos cargos en plena crisis económica".

Los agentes sociales presentes en la negociación del Acuerdo de Policial criticaron que la "incapacidad negociadora" de la Corporación madrileña "quiere ocultar una gestión improvisada e insostenible, sin objetivos y de estilo unilateral, dictatorial y opaco, sin contar con la participación de los representantes de los trabajadores".

CRÍTICAS AL CONVENIO COLECTIVO

En este puntos, los sindicatos de la Policía Municipal acusaron al alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón, de incumplir la promesa electoral de oferta de empleo público de 1.500 policías que, junto a la asunción de nuevas competencias, "ha llevado al Gobierno municipal a querer subir el déficit de la plantilla, modificando jornadas y horarios operativamente eficaces durante más de 25 años".

"La falta de valoración de puestos, la falta de objetivos y de participación sindical ha conseguido que este Equipo de Gobierno profundice en meditas tan erráticas como confundir la productividad con la compara de libranzas y descansos del personal", indicaron los representantes de los trabajadores.

Asimismo, recalcaron que sus reivindicaciones no son económicas, sino laborales y de coordinación de la vida familiar y laboral, al tiempo que denunciaron que el nuevo convenio plantee remuneraciones por productividades. "A lo mejor los tiros van por querer que los agentes multen más", agregaron.

El portavoz de la Unión de Policía Municipal, Javier Pallares, también se quejó del estilo del Ayuntamiento, "que ha conseguido judicializar" las relaciones laborales de este colectivo. "Hemos ganado juicios, desde el nombramiento ilegal de mandos hasta la suspensión arbitraria de días de vacaciones", dijo, al tiempo que representante de CC.OO., Federico Solvez, precisó que con estas medidas lo que quiere hacer el Consistorio es "demorar" los pagos "ante el atasco de tres años del Contencioso-Administrativo".

Por su parte, el portavoz del Colectivo Profesional de Policías Municipales (CPPM), Francisco Torres, arremetió contra la reorganización de los horarios de trabajo planteados por el Ayuntamiento ya que, a su juicio, estarían disponibles en los nuevos turno el 17 por ciento de la plantilla frente al 89 por ciento en el modelo actual.

"Ahora tenemos tres turnos de ocho horas y ha funcionado bien. Ahora pretenden que hay más turnos y crear uno llamado Noche 2 para trabajar las noches de jueves a sábado que, según nos indicaron, si nadie quiere incorporarse a él sería cubierto por agentes de nuevo ingreso. Y nosotros no queremos hipotecar la vida familiar de esos policías", indicaron los sindicalistas.

MANIFESTACIÓN PASADA Y FUTURA

Los sindicatos, entre los que se encuentran CSI.F y UGT aparte de los mencionados, aseguraron que la Delegación del Gobierno no ha autorizado el recorrido de la manifestación prevista para el día 26 de octubre y que contaría también con miembros del Samur-Protección Civil, Bomberos del Ayuntamiento y Agentes de Movilidad.

"La negociación en estos sectores incluso están más enrocada, ya que a estos colectivos les afecta también una modificación por turno o propuestas de crear jornadas de 12 horas de bomberos interinos", señalaron.

Según explicaron, el departamento que dirige Amparo Valcarce no permite que discurra entre Callao y Cibeles o entre Atocha y Cibeles, los dos trayectos planteados. Por ello, anunciaron que recurrirán esta decisión ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid porque consideran que se conculcan así su derecho de manifestación.

Respecto a la anterior marcha celebrada el pasado martes, y que acabó con una comunicación del Ayuntamiento a la Delegación del Gobierno por el incumplimiento del itinerario por parte de los convocantes, los representantes policiales señalaron que el subdelegado les ha avisado que puede haber sanciones por este motivo.

Los sindicatos señalaron que la manifestación duró el tiempo previsto y que en el permiso dado "quedó claro que si los participantes eran numerosas, como así comprobamos, se podría interrumpir la circulación del Paseo del Prado", como así ocurrió con los carriles en dirección Norte.

"Además, unos cien policías podrían hacerse una fotografía ante el Palacio de Cibeles. Quizá fueron algunos más y en ese momento el tráfico ya estaba cortado. El Ayuntamiento se queja mucho de esta manifestación. Eso es que les molestó mucho, ya que la participación se desbordo y el 90 por ciento de la plantilla que libraba estaba allí", indicaron los agentes sociales.

Ante todo ello, y a pesar de que no descartan realizar otro tipo de protestas, los sindicatos apostaron por el diálogo social para llegar a un acuerdo con el Ayuntamiento de Madrid para conseguir "un compromiso permanente con la modernización y la calidad en la prestación de un servicio público tan esencial en el estado de derecho y bienestar social como es el de la Policía Municipal".