MADRID, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
El portavoz adjunto del Grupo Socialista, José Manuel Franco, recordó hoy que con la firma del nuevo sistema de financiación autonómica por parte del Gobierno de Esperanza Aguirre, éste ha aceptado la cancelación de cualquier deuda con la administración central.
Esto se recoge en la Disposición Adicional sexta del acuerdo, que establece esta cancelación una vez aceptados los recursos adicionales por parte del Estado en virtud del principio de lealtad institucional. Estos recursos adicionales suponen un ingreso para la Comunidad de Madrid de 1.500 millones de euros en el primer año y de 1.700 millones una vez que el sistema funcione plenamente.
Franco critica la "falta de seriedad y de lealtad de Aguirre, que denuncia un acuerdo que ellos mismos han firmado y aceptado. Se refiere a la reclamación por parte del Ejecutivo autonómico de la llamada "deuda histórica", que sin embargo, recuerda el diputado, "queda cancelada según el acuerdo que ha firmado el Gobierno regional al aceptar los 1.500 millones de euros de recursos adicionales que le proporcionará el Gobierno de España".
Este aspecto queda recogido en la Disposición Adicional sexta de la ley que regula el nuevo sistema de financiación autonómica, que establece que "con la incorporación de recursos adicionales por parte del Estado a las necesidades de financiación de las comunidades autónomas y ciudades con estatuto de autonomía en el marco de la presente ley, se garantiza (su) suficiencia financiera para el cumplimiento de la totalidad de las obligaciones legales existentes hasta la fecha de aprobación de esta ley, dando satisfacción al principio de lealtad institucional".
Según resume Franco, "al firmar la aceptación del nuevo sistema de financiación, Aguirre ha firmado que con los recursos adicionales que recibe del Estado se cancela cualquier deuda que hubiese. No hay deuda y así lo han reconocido".
"El nuevo sistema de financiación autonómica elaborado por el Gobierno de José Luis Rodríguez en concreto prevé para la Comunidad de Madrid un total de 1.500 millones de euros en el primer año y otros 1.700 millones una vez que el sistema funcione plenamente", destacó Franco, que subrayó que esta aportación "supone una inyección extremadamente importante de nuevos recursos que deben destinarse a mejorar la sanidad, la educación y los servicios sociales".
Por otro lado, el portavoz adjunto recordó que el anterior sistema de financiación autonómica -redactado por el actual consejero de Economía y Hacienda, Antonio Beteta, en su etapa de secretario general de Política Fiscal, Territorial y Comunitaria del Ministerio de Hacienda- "no tenía en cuenta los cambios de población, ya que dichos cambios se recogían en dos artículos de imposible aplicación".
En el artículo 4, explicó Franco, las cantidades que percibía cada comunidad autónoma se calculaban en función de las competencias comunes. El problema radicaba en que su aplicación dependía de la unanimidad de las autonomías, lo que significaba que comunidades que perdían población tenían que aceptar perder recursos. Como nada les obligaba a aceptarlo, no era posible el acuerdo y por tanto no se aplicó jamás.
Otro artículo regulaba las asignaciones de nivelación, es decir, recursos del Estado solamente para aquellas comunidades que aumentasen su población tres puntos porcentuales por encima de la media nacional. "Esto era imposible de aplicar, a no ser que una región hubiese sufrido un crecimiento histórico, ya que se debía sumar al porcentaje que subía la población en el Estado. Así, por ejemplo, si la media de la población nacional subía un 2%, la comunidad beneficiada tenía que subir un 5% y eso jamás ha ocurrido", explica el parlamentario.
Por lo tanto, "lo que persigue Esperanza Aguirre con su reclamación al Estado no es otra cosa que tratar de desviar la atención de sus errores de gestión, que y seguir con su política de confrontación con el Gobierno de España pase lo que pase. Aguirre es el ejemplo de la falta de lealtad institucional: firma el nuevo sistema de financiación, coge el dinero y corre", concluye Franco.
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