MADRID 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las reclamaciones de los consumidores madrileños sobre servicios financieros, ya sean entidades bancarias o aseguradoras, aumentaron el año pasado un 9,92 por ciento aunque las más frecuentes siguen siendo las de telefonía móvil y fija, con cuatro de cada diez, como ha apuntado el Ayuntamiento de Madrid a través de un comunicado.
Así lo refleja el balance de 2012 de la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC), que cuenta con una oficina en cada distrito y una central. El año pasado tramitó un total de 41.158 expedientes, entre reclamaciones, solicitudes de información y denuncias, una cifra ligeramente inferior a la de 2011 (41.970). Por asuntos, la mayoría fueron reclamaciones (75 por ciento) y solicitudes de información (23,39 por ciento).
El descenso en el número de expedientes tramitados en la OMIC no es generalizado en todos los grupos. La disminución mayor se observa en alimentación, con una reducción del 8,50 por ciento; compra de bienes, que baja un 6,87 por ciento, y en vivienda y servicios, con descensos del 5,83 por ciento y de 8,5 por ciento, respectivamente.
Por otro lado, aumentaron un 2,31 por ciento los expedientes relativos a empresas de suministros y un 9,32 por ciento los de solicitud de información.
EMPRESAS DE SUMINISTRO
Las reclamaciones sobre empresas de suministros llevan experimentando un crecimiento sostenido en los últimos años, si bien este aumento se modera en 2012. Las referidas a agua, gas, electricidad, telefonía y proveedores de acceso a Internet representaron más de cuatro de cada diez (43,63 por ciento) de los expedientes gestionados en la OMIC.
Aunque este grupo mantiene un crecimiento sostenido, los datos de 2012 arrojan un crecimiento interanual de solo el 2,31 por ciento, mientras que en 2011 fue del 9,23 por ciento en relación al año anterior
Un análisis más pormenorizado revela variaciones importantes en la tendencia observada en los últimos años. La más significativa es la relativa a la telefonía móvil, que ha crecido sistemáticamente en los últimos años y que en 2012 refleja la inversión de esta tendencia ya que se han tramitado 8.372 asuntos frente a los 10.320 del año anterior, un descenso importante que se cifra en el 18,88 por ciento.
El 25,55 por ciento de los asuntos tratados en la OMIC se dirigieron contra empresas de servicios (10.517 expedientes), un 5,30 por ciento menos que en 2011, una tendencia descendente ya observada el año anterior.
FINANCIEROS Y REPARACIÓN DE AUTOMÓVILES
Los servicios financieros, que engloban a las entidades bancarias y a las aseguradoras, con 3.081 expedientes, lideran este grupo constituyendo un 29,30 por ciento del total del grupo de los servicios, observándose un aumento del 9,92 por ciento.
El segundo sector específico con mayor importancia cuantitativa, dentro del grupo de los servicios, son las reparaciones de automóviles que se mantienen en un valor similar al del año anterior, con un ligero descenso del 2,67 por ciento. Las reparaciones domésticas, con 348 reclamaciones, disminuyen, sin embargo, un 27,50 por ciento
Las reclamaciones debidas a la adquisición de bienes de consumo, con 6.943 expedientes, disminuyen moderadamente. A la cabeza de las reclamaciones están la compra de aparatos telefónicos (863 asuntos), adquisición de textil (762) y el de la compra electrónica, del que se han tramitado 670 asuntos.
En este último grupo es remarcable el aumento observado (55,09 por ciento), que se justifica por la creciente utilización de este sistema de adquisición de productos por parte de los consumidores.
Con los 2.744 asuntos tramitados en 2012 sobre alimentación y los 792 de a vivienda se completa la distribución por grupos del total de expedientes tramitados en la OMIC. En ambos se confirma la tendencia descendente.
El pasado año se tramitaron 2.243 solicitudes de arbitraje que han dado lugar a 1.022 vistas arbitrales, cifra similar a la de 2011. El 47,16 por ciento resultó total o parcialmente a favor del reclamante; el 23,48 por ciento se desestimó, y el resto corresponden a suspensiones, inhibiciones y laudos que ponen fin al procedimiento arbitral.