San Fernando.- El Canal de Isabel II instala un sistema piloto en la depuradora para evitar la salida de malos olores

Actualizado: lunes, 25 septiembre 2006 19:25

SAN FERNANDO DE HENARES, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Canal de Isabel II ha instalado alrededor de la depuradora de San Fernando de Henares una instalación para evitar la salida al exterior de malos olores. El sistema consiste en un tubo azul de unos 20 centímetros de diámetro perforado con unos difusores que expulsan un producto ambientador, creando así un 'efecto pantalla'.

Se trata de un proyecto piloto que también funciona en la depuradora de Móstoles y con el que se pretende solucionar el problema que sufren alrededor de 10.000 vecinos del municipio del Corredor del Henares.

La alcaldesa de San Fernando de Henares, Montserrat Muñoz, visitó hoy la depuradora para comprobar el funcionamiento de este novedoso sistema. "El tema del olor es complejo. Nosotros lo hemos podido ver por la depuradora, pero confiamos en que esta nueva tecnología contribuya a que se elimine", declaró.

No obstante, Muñoz aseguró que "tanto el Gobierno municipal como los directores del Canal (de Isabel II) buscarían otra" solución si este sistema piloto "no fuera eficaz". "Confiamos en todo caso, en que lo sea", insistió. Precisamente, para valorar la eficacia de la iniciativa, se harán mediciones durante los próximos meses.

Respecto al producto que se expulsa desde el tubo al aire, el gerente del Canal de Isabel II, Ildefonso de Miguel, dijo desconocer su composición argumentando que "General Electric, que es la empresa que lo fabrica, tiene derecho de patente y no lo han publicado". "Pero eso sí -matizó-, ha pasado por todas las garantías de control de sanidad".

VERTIDO DE AGUA DE DEPURADORAS

De Miguel también se pronunció sobre la denuncia hecha por la Asociación Ecologista Jarama Directo sobre la desecación del río en los alrededores del municipio de San Fernando de Henares y que se esté vertiendo el agua de las depuradoras, convirtiendo el río "en una cloaca".

El gerente del Canal de Isabel II aseguró que el organismo que dirige "está cumpliendo la legislación". "El agua que sale de los embalses, lo que se llama caudal ecológico, en teoria no tendríamos que echar ningún tipo de agua porque tendríamos que reservarla para el abastecimiento. A pesar de eso se están vertiendo 200 litros por segundo en la zona alta. En la zona baja recibe el aporte de las depuradoras, y está cumpliendo estrictamente la normativa. Está claro que no se puede beber, pero porque debe ser tratada", explicó.

De Miguel agregó que el agua requiere un tratamiento siempre, tanto para el riego como para ser bebida, y que la Comunidad de Madrid junto con el Canal están poniendo en marcha una inversión "sin precedentes para que el agua de las depuradoras se reutilice a través de una nueva red de aguas para regar los jardines, por ejemplo".