MADRID, 3 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha condenado al Servicio Madrileño de Salud (SERMAS) a pagar una indemnización de 21.000 euros al esposo y a las dos hijas de una mujer que murió al no serle detectado a tiempo un cáncer de estómago, según informó hoy la Asociación El Defensor del Paciente.
En la denuncia, la familia de la mujer culpaba al centro de especialidades de Aguacate como los servicios de Urgencia del Hospital 12 de Octubre de Madrid de un retraso de más de tres meses en la detección del tumor, lo que dio lugar a acudir a la medicina privada.
La sentencia asegura que esta "demora importante" en las exploraciones solicitadas determinó que tuviera que acudir a la sanidad privada para obtener un diagnóstico y un tratamiento paliativo de su sintomatología cada vez más acusada, "con grave perjuicio económica para sí misma y para sus familiares, cuando dicho alivio debía haberlo obtenido de la sanidad pública sin coste alguno añadido".
No obstante, el juez señala que, aunque hubo "una pérdida de ocasión" en el retraso diagnóstico al retrasarse las pruebas clínicas, "no cabe afirmar que incidió en el desgraciado final, en cual era inevitable. "El cáncer estaba muy avanzado cuando dio los primeros síntomas y poco se podía hacer aunque se hubiera detectado", continuó.
En opinión de la Asociación El Defensor del Paciente, esta sentencia es otro "lujo", de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, al que tiene acostumbrado a las personas que presentan una denuncia por negligencia médica. "En este caso, se indemniza con 21.000 euros el reintegro de gastos por acudir a la privada, pero las hijas y el viudo solicitaban 110.000 euros por el daño moral", apuntó. Esta resolución no es firme y frente a la misma cabe interponer un recurso de casación.
EL CASO
El caso de la mujer de 63 años comenzó a finales del mes de marzo de 2004, cuando empieza a sentir molestias en el estómago que derivaban en intensos dolores y vómitos tras la ingesta. Se le diagnosticó epigastralgia y dado que dicha patología no cedía al tratamiento, fue remitida a radiología para realizarle una placa de Rx esófago-gastroduodenal. Según los demandantes, se le dio fecha para consulta siete meses después.
Pero antes, a finales de abril de 2004, la paciente acude al Servicio de Urgencias del 12 de Octubre con sintomatología de dolor gástrico con nauseas y vómitos, sintomatología digestiva acusada y un síndrome constitucional que hacía sospechar una patología grave. Ante su situación, solicita consulta con carácter preferente con el especialista, "a pesar de lo cual le dan cita para dos meses después el 22 de junio de 2004 y un estudio radiológico, dándole cita para el día 5 de agosto de 2004".
Durante este período de tiempo la paciente acudió en dos ocasiones a las urgencias del mismo hospital por incremento progresivo y rápido de su sintomatología digestiva, "sin que fuera sometida a exploración alguna y derivándola a sus especialista", indicó la asociación.
Ante el agravamiento de su patología y las demoras, la enferma decidió acudir a un centro privada, donde fue diagnosticada de carcinoma estenosante de antro gástrico e implantes metastásicos múltiples, por lo que fue sometida a cirugía paliativa mediante gastroyeyunostomía en fecha.
