Denuncia que el Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón consiente la situación de ruina
POZUELO DE ALARCÓN, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
Más de siete meses han pasado ya desde que Doney, un trabajador de 36 años de edad, se encuentra en lo alto de una grúa en Pozuelo de Alarcón como medida de protesta para que a la empresa de construcción para la que trabaja reciba la cantidad de 150.000 euros que le adeudan, mientas asegura que no bajará hasta que le paguen lo que es suyo.
Doney todavía recuerda como si fuera hoy mismo el día en que subió a la estructura. Fue el 10 de marzo de 2010. Desde entonces, aguanta cubierto tan sólo por una lona de plástico que le ha servido de refugio durante todo este tiempo ante las bajas temperaturas y el fuerte viento que circula a esa altura. Según recordó en declaraciones a Europa Press Televisión, algunos noches tuvo que aguantar que el termómetro marcase "menos diez grados bajo cero".
A medida que avanzó el tiempo y llegó el verano, el cambio fue radical. "Había 40 grados en verano", afirmó que tuvo que soportar durante los meses estivales. Hace pocos días ya ha vivido las fuertes lluvias del otoño y lo que teme ahora es el frío que se avecina en los próximos meses.
SIETE MESES SIN ABRAZAR A SUS HIJOS.
Pero lo que más preocupa a este trabajador no es ni el frío, ni el calor, ni la lluvia, si no llevar más de medio año sin poder estar cerca de sus hijos o que tanto sus compañeros como él puedan perder el empleo porque la empresa para la que trabajan, Jigar SA, no pueda asumir sus costes sin el dinero que le adeuda la constructora Ploder Uicesa por los trabajos que realizaron en las obras del parking de la plaza de la localidad madrileña. De momento, ya han tenido que despedir a 140 empleados.
"Para no perder el empleo y que mis compañeros tampoco lo perdieran tomé la decisión de subirme. Desde el primer día en que me subí he dicho que voy a aguantar aquí hasta el final. Es la única forma para que yo me baje de aquí, cuando nos paguen lo que nos deben", aseveró.
En verano, les tuvo que explicar a sus hijos "porqué" su padre no les podía llevar este año a la playa, como "todos los veranos", y ahora, los pequeños le piden "que les lleve a la nieve". "En cierta forma lo entienden, les explico que alguien lo tiene que hacer y ya que lo he decidido tengo que continuar. Qué más quisiera que bajarme", añadió.
Después de tanto tiempo subido a la grúa, Doney tan sólo ha tenido un catarro "muy leve" y ya se ha acostumbrado a asearse con lo que le pueden subir a través de una polea sus compañeros. "Agua embotellada en verano" y "paños húmedos" ahora que bajan las temperaturas y les es más fácil de transportar.
En cuanto a la comida, también son sus compañeros los que se la suministran o, si no, un restaurante cercano que suele cocinarle lo que le gusta a Doney, casi todo menos los guisantes.
EL AYUNTAMIENTO "SE LAVA LAS MANOS".
Aunque su jefe siempre le ha dicho que "lo primero" es su "salud" y que si se baja hay otros compañeros dispuestos a subirse por él, Doney recordó que la última vez que se cambió por otro trabajador despidieron a los vigilantes de seguridad de la obra por haberlo impedido y, según reconoció, no quiere que vuelva a ocurrir.
Doney aseguró que cuando "termine la obra", el Ayuntamiento se verá "obligado a desmontar la grúa" y para ello, según confió, tendrán que pagarles.
Además, reprochó que el Consistorio "no ha hecho absolutamente nada" y criticó que el alcalde, "responsable de la obra, se lava las manos". "Él dice que ha cumplido con sus pasos, que no le debe dinero a nadie, algo que yo veo ridículo, debería de presionar a Ploder Uicesa para que cumpla con sus pagos y no dejarnos aquí", apostilló.
AYUNTAMIENTO DE POZUELO.
Por su parte, el concejal de Obras y Servicios de Pozuelo de Alarcón, Pablo Gil, aseguró a través de contacto telefónico con Europa Press Televisión que la Administración local "ha hecho todo lo que ha podido hacer" que es "mediar entre una empresa que no puede pagar y la otra" y reconoció que no servirá "de nada" esta manera de protestar.
Así, aseveró que el Ayuntamiento "no tiene deudas con ninguna" de las empresas y aclaró que "es un problema entre particulares". En este sentido, explicó que Ploder Uicesa "es la que tiene la deuda reconocida y está en concurso de acreedores", por lo que "la ley obliga a no hacer ningún pago anterior a cuando se presentó al concurso".
Por otro lado, Gil mostró su preocupación porque Doney se baje "por su integridad física", ya que la estructura puede convertirse "en un pararrayos" y comentó que "la grúa no estorba", por lo que subrayó que el aparcamiento entrará en funcionamiento "en breve" aunque Doney esté subido a la grúa. "No van a conseguir nada", zanjó.
EUROPA PRESS TELEVISIÓN DISPONE DE IMÁGENES DE DONEY SUBIDO A LA GRUA, DE LAS OBRAS DE LA PLAZA DEL PADRE VALLET, ASÍ COMO DE LAS DECLARACIONES DE DONEY CONTANDO SU SITUACIÓN.
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