Una treintena de socorristas vigilarán este verano el Pantano de San Juan apoyados por medios aéreos, terrestres y acuáticos

Actualizado: domingo, 14 junio 2009 15:48

El dispositivo se presenta con simulacro de salvamento de dos bañistas, y el SUMMA recuerda la peligrosidad del embalse

MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -

Una treintena de socorristas del SUMMA 112 acreditados en salvamento en medio natural y manejo de embarcaciones vigilarán los fines de semana y festivos de este verano, en horario de 11 a 19.30 horas, el Pantano de San Juan, donde acuden tradicionalmente miles de bañistas madrileños en los días de más calor, apoyados por medios aéreos y acuáticos, informó hoy el Gobierno regional.

Así, 32 profesionales del servicio trabajarán en turnos rotatorios para velar por la seguridad de los bañistas. Contarán para ello con un bañador tipo licra y pantalón bañador, camiseta identificativa, neoprenos, chalecos salvavidas, latas y tubos de rescate, casco, aletas, bolsa de rescate con cabos flotantes de 12 a 15 metros, prismáticos y mapas cartográficos del pantano.

Además de este equipo personal, la dotación estará compuesta por un carrete --arnés con un cabo de 200 metros que sirve para realizar salvamentos de largas distancias--, una embarcación rígida de seis metros de eslora con motor fuera borda, moto acuática con camilla de salvamento, todo terreno como vehículo de apoyo al rescate, vehículo de apoyo logístico, mochilas de apoyo respiratorio con oxígeno, mochilas para curas, desfibrilador automático, material para inmovilización y movilización de pacientes traumatizados, y material de apoyo para el rescate y salvamento acuático.

Todo ello será apoyado desde dos puestos sanitarios. El primero estará ubicado en Virgen de la Nueva, y servirá de base principal abierta al público. El segundo será una base logística ubicada en la zona del Club Náutico de Madrid. Además, los equipos estarán conectados mediante un sistema de comunicaciones internas basado en la telefonía móvil y equipos portátiles de la red trunking del SUMMA 112, que también servirá para mantener el contacto con el centro coordinador.

Como ocurre con todos los dispositivos especiales que organiza el SUMMA, el operativo del Pantano de San Juan estará controlado desde dicho centro coordinador ubicado en la calle Antracita. Además, en la zona del pantano también se cuenta con un puesto de control, ubicado en el punto kilométrico 5,500 de la carretera M-957. Esta instalación se empleará como punto de atraque de la embarcación rígida, así como para botar la moto de agua.

A todo este dispositivo asistencial hay que añadir los recursos habituales del SUMMA que operan en la zona del pantano de San Juan. Se trata de la UVI móvil con base en San Martín de Valdeiglesias y una helisuperficie para la toma de tierra de los dos helicópteros sanitarios de los que dispone el servicio. De hecho, toda activación del operativo especial del pantano supone la alerta a la UVI móvil y de los helicópteros, por si se diera el caso de que la gravedad de la situación hiciera necesario un traslado del paciente a un centro hospitalario.

Con este dispositivo desplegado se dará cobertura a cualquier zona del pantano, pudiendo llegar los profesionales del servicio en alrededor de cinco minutos al punto más alejado de los catorce kilómetros de extensión desde el momento de recepción del aviso.

SIMULACRO

El SUMMA 112 presentó hoy este dispositivo especial de asistencia sanitaria realizando un simulacro, al que asistió el director gerente del servicio, Pedro Martínez Tenorio.

El simulacro consistió en el salvamento de dos víctimas avistadas por el personal de guardia durante la vigilancia realizada desde el puesto sanitario de Virgen de la Nueva. A las 11 horas, uno de los bañistas que trataba de cruzar a nado el pantano sufrió un calambre y se sumergió a unos diez metros de la orilla.

Se trata de una zona de alta peligrosidad, ya que la orografía del pantano hace que se ganen muchos metros de profundidad a muy poca distancia de la orilla. El equipo de vigilancia del puesto avistó a la víctima e inmediatamente tres socorristas se dirigieron al lugar en la embarcación rígida para hacer búsqueda y salvamento del bañista sumergido. Tras ser recuperada, los técnicos del servicio la trasladaron a tierra y fue evacuada en una ambulancia de soporte vital básico, dado su carácter leve.

En ese momento, otro bañista resultó herido de gravedad al lanzarse al agua desde una zona de rocas en la orilla contraria del pantano. Otro equipo de tres socorristas salió inmediatamente en la lancha neumática y procedió a inmovilizar al herido en el lugar para trasladarle. El equipo avisó por la red trunking de la gravedad del traumatismo y, desde el centro coordinador, se activó uno de los helicópteros medicalizados de la Comunidad de Madrid. El herido fue trasladado en la lancha al lugar de toma del helicóptero sanitario, que le trasladó a un centro hospitalario.

Con este ejercicio, el SUMMA 112 ha puesto de relieve la labor que realizan sus profesionales en este dispositivo, que añade a la asistencia sanitaria, la prevención y vigilancia continua. Son muchos los casos en los que los técnicos del servicio se ven obligados a realizar un aviso a los bañistas si no tienen un nivel de natación adecuado.

Y es que se dan muchos casos de bañistas que no saben nadar y tratan de adentrarse en el pantano desconociendo la profundidad del mismo, por lo que el SUMMA recordó la peligrosidad de esta práctica incluso con barcas inflables. Junto a la prevención y los avisos a los bañistas, la rápida llegada por parte de los efectivos sanitarios, puede salvar una vida, por lo que los técnicos realizan patrullas por todo el pantano durante la guardia.

ESTADÍSTICAS 2008

Según datos del Ejecutivo autonómico, el año pasado estos profesionales realizaron 56 intervenciones sanitarias. Las heridas y cortes fueron la primera causa (37 por ciento de los casos), seguido de traumatismos de diversa consideración (16 por ciento). Buena parte de estos traumatismos y heridas se produjeron por la temeridad de los propios bañistas al lanzarse desde las zonas de rocas. También se atendieron mareos, ahogamientos y semi-ahogamientos (9 por ciento) y dolores (4 por ciento).

Por sexos, las asistencias a varones prácticamente duplicaron las que requirieron las mujeres. Así, un 66 por ciento de los atendidos el pasado año en este dispositivo fueron hombres, mientras que sólo un 34 por ciento fueron mujeres.