El uso del transporte público en Madrid se estabiliza con un crecimiento del 25%

MADRID, 16 Abr. (EUROPA PRESS) -

La demanda de transporte público en la región se estabiliza, con crecimientos cercanos al 25 por ciento respecto a las dos semanas anteriores, cuando estaba activa la hibernación económica de las actividades no esenciales por el coronavirus, según datos del Consorcio Regional de Transportes de Madrid (CRTM).

En concreto, ESTE miércoles se registraron 497.340 viajes, lo que supone una cifra similar a la registrada el día anterior, lo que supone una caída respecto a hace un año de un 90,7 por ciento.

Así, por medios de transporte, el descenso fue del 91,4 por ciento en el caso de Metro de Madrid, que sumó 201.327 viajes; la Empresa Municipal de Transportes de la capital registró una caída del 91,6 por ciento y 126.670 viajes; las líneas de autobuses urbanas e interurbanas del Consorcio registraron una bajada del 88,3 por ciento y 98.330 viajes; mientras que la red de Renfe Cercanías, un descenso del 89,4 por ciento y 71.013 viajes.

Por su parte, este jueves Metro de Madrid ha registrado en la primera hora de la mañana --entre las 6 y las 10 horas- 59.126 viajeros, lo que supone un 90 por ciento menos que el mismo día del año pasado.

La Consejería de Transportes, Movilidad e Infraestructuras ha recordado que ha adaptado la oferta de transporte público al retorno esta semana de los empleados de los sectores no esenciales a sus puestos de trabajo. En concreto, se ha reforzado oferta de transporte público, especialmente en las horas punta, para evitar las aglomeraciones y "minimizar el impacto del coronavirus".

Asimismo, ha remarcado que mantiene un seguimiento continuo de la marcha del transporte público en la región, por lo que los ajustes se podrán ir modificando según la evolución de la demanda en el conjunto del sistema.

Por último, ha puesto el foco en la necesidad de que los ciudadanos permanezcan en sus domicilios y que , si el desplazamiento es estrictamente necesario, ha indicado que aconseja a las personas mayores y a quienes padecen alguna enfermedad que eviten, por motivos de salud, utilizar el Metro y el transporte público en general; una recomendación de las autoridades sanitarias que se hace extensiva a sus cuidadores y a quienes conviven con estos sectores de población vulnerable.