MADRID 7 Ene. (EUROPA PRESS) -
La delegada del Gobierno en Madrid, Amparo Valcarce, se ha mostrado "consternada" por la fuga de un reo en la cárcel de Estremera con una orden judicial falsa y ha asegurado que hechos como éste "no pueden volverse a producir de ninguna de las maneras".
Tras la presentación del Balance de Seguridad Vial de 2010 en la Comunidad, Valcarce ha afirmado que confía en el trabajo y las investigaciones del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) como por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para resolver el caso y dirimir responsabilidades.
El objeto de las investigaciones es el de determinar quien remitió el pasado 30 de diciembre, el día previo a Nochevieja y al fin de semana, un exhorto judicial falsificado, supuestamente dictado por la Sección número 23 de la Audiencia, por el que se ordenaba la puesta en libertad de este preso. Esta orden falsa llegó vía fax a la prisión y los funcionarios liberaron al interno de Estremera a primera hora de la tarde.
Tras las diligencias abiertas por el TSJM se podría deducir la comisión de delito de falsificación oficial de documento público y de quebrantamiento de condena. Si se concluyen estos extremos, el presidente del Tribunal trasladará estas investigaciones a la Fiscalía y al Juzgado de Guardia para que iniciara una investigación judicial penal.
Por su parte, la propia Sección 23 de la Audiencia Provincial de Madrid --que lleva casos como el de Álvaro Ussía o el de 'Nanysex'-- ha dictado una orden de busca y captura nacional e internacional para lograr detener a José Carlos Serna, y ha instado al Decanato judicial de Arganda, del que depende la prisión de Estremera, a abrir una investigación judicial penal.
Así se hizo la otra vez en la que Serna salió de la cárcel de Valdemoro ilegalmente con el mismo procedimiento: un notificación vía fax supuestamente de la Audiencia. Ocurrió el pasado viernes 15 de octubre, aunque fue arrestado tres días después por la Guardia Civil.
Según fuentes judiciales consultadas por Europa Press, para llevar a cabo esta falsificación --un hecho "muy puntual", recalcan-- se debe tener un conocimiento pormenorizado del procedimiento judicial, por lo que no se descarta que el fuego pueda contar con un cómplice especializado en estos asuntos.
Serna Sánchez, de 57 años, ingresó en prisión en marzo de 2008 tras se arrestado en Portugal por participar en el secuestro del empresario Pedro Aguirre Ormaechea. El grupo de delincuentes que participó en el delito pedía 11 millones de euros por su liberación.
Las autoridades policiales nacionales e internacionales buscan desde hace una semana de manera prioritaria a Serna Sánchez.