MADRID, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Coordinadora de Colectivos Afectados por el Plan integrado de mejora de las instalaciones (Pimic) del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT) pidió hoy al Gobierno central que lleve a cabo un estudio epidemiológico en los barrios cercanos al centro para detectar posibles incidencias y fugas radiactivas como la ocurrida hace unas semanas en la central nuclear de Ascó (Tarragona).
El portavoz de la Coordinadora, Miguel Yuste, explicó que la asociación realizó un estudio entre los vecinos de los barrios próximos a la Dehesa de la Villa, donde está ubicado el Ciemat, que reveló que el porcentaje de muertos por cáncer en esa zona es un siete por ciento más elevado que en el resto de la población española.
"Estamos francamente alarmados y angustiados porque, después de tantos años, el problema que nos afecta, no sólo no se ha solucionado, sino que la peligrosidad de la instalación nuclear se ve incrementada con las operaciones de descontaminación de parte de sus edificios y terreno, el denomidao Pimic. Nadie nos ha informado y actualmente el Ciemat hace lo que le da la gana, como el señor Burns en los Simpson", indicó.
Por ello, la Coordinadora de Colectivos Afectados ha registrado en el Congreso de los Diputados un escrito en el que solicitan la revisión de las reiteradas solicitudes de intervención para "dar una pronta y adecuada solución a la situación inaceptable creada por la existencia de una instalación nuclear que conlleva el transito, el procesamiento y el almacenamiento de materiales y artefactos nucleares y radiactivos en la Dehesa de la Villa y en la Ciudad Universitaria de Madrid.
El portavoz de la asociación y también miembro del sindicato CGT en el Comité de Empresa del Ciemat señaló que ya un informe, que hace una década reflejaba el "falseamiento de datos y conclusiones" de un estudio epidemiológico que analizaba la exposición profesional a dosis bajas de radiaciones ionizantes y mortalidad entre los trabajadores de la antigua Junta de Energía Nuclear, hoy Ciemat".
En ese sentido, pidió al Gobierno central que realice un estudio científico epidemiológico sobre el impacto radiactivo de esta central, como pidió el Congreso de los Diputados en 2003 y "que dejen de falsear con datos, como han hecho en Ascó, que se ha descubierto finalmente que hubo una fuga que provocó exposiciones ionizantes mil veces por encima de las permitidas y varias veces superiores a las que en un principio indicó el Consejo Nacional de Seguridad Nuclear (CSN)".
"Recientemente hemos conocido que con motivo del escape radiactivo de Ascó, el CSN reconoce que la actuación del titular, al proceder de manera injustificada al aumento del punto de tarado de los monitores de radiación, hizo posible el cambio de ventilación de emergencia a n normal, inhabilitando las correspondientes señales de alarma, posibilitando de esta manera que los elementos radiactivos salieran al exterior sin pasar por los sistemas de filtrado de la ventilación de emergencia", indicó Yuste.
DIEZ AÑOS DE LUCHA
La asociación de afectados inició su lucha contra el desmantelamiento de las instalaciones del Ciemat hace diez años, con la presentación en el Congreso de los Diputados de un escrito el 26 de enero de 1998 y le siguieron otros en 1999, 2003 y 2007 en los que solicitaban una intervención "pronta y adecuada" para solución a la situación creada con el tránsito, procesamiento y almacenamiento de materiales nucleares en la Dehesa de la Villa madrileña.
"Ya en 2006 la Coordinadora se dirigió a la Fiscalía de Medio Ambiente para informarles de su "fundada sospecha de que la dirección de Seguridad y PIMIC del Ciemat y el CSN falsearon los datos necesarios para el cálculo de los factores de riesgo radiactivo tenidos en cuenta en la Declaración de Impacto Ambiental del PIMIC", indicó Yuste.
En la rueda de prensa realizada hoy en la Asociación de Vecinos 'San Nicolás' de la Dehesa de la Villa, varios miembros apuntaron casos de cáncer propios y entre sus familiares, así como otras afecciones pulmonares y respiratorias y malformaciones genéticas, "todas debidas a la radioactividad y que además tienen progresión geométrica".
CARRERA "MUTANTE", NUEVA MODALIDAD OLÍMPICA
Por otro lado, Yuste se quejó de la escasa sensibilidad que el pueblo madrileño y sus políticos de todas las tendencias parecen tener con esta problemática y les animó a participar en una serie de actuaciones reivindicativas para evitar que se produzca una fuga nuclear "como la de Ascó o incluso como la de Chernóbil".
Así, en octubre organizarán una carrera popular de una milla en la zona del Ciemat de la categoría de mutantes radiactivas, "como modalidad olímpica a incorporar a los fastuosos Juegos Olímpicos que quiere preparar Madrid". El ganador se llevará una medalla de plutonio, el segundo una de americio y el tercer clasificado una medalla de uranio.
Asimismo, realizarán una protesta en la inauguración hoy de la fiestas de la Dehesa de la Villa para exponer al concejal del distrito la necesidad del desmantelamiento de la central y de la realización del estudio epidemiológico sobre la influencia que la instalación tiene sobre la salud de las personas, "en una zona como la universitaria en la que deambulan miles de muchachos y muchachas en edad fértil, que son los más proclives a las radiaciones".