SEVILLA, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
El consejero andaluz de Innovación, Ciencia y Empresa, Francisco Vallejo, aseguró hoy que "sin ninguna duda" la solución para la planta de Delphi en Puerto Real (Cádiz) "no será inocua, sino más bien dura", precisando que "lo que nadie puede esperar es que esta situación de cierre se resuelva sin problemas".
A preguntas de los periodistas tras firmar un convenio con Santana Motor y Suzuki que amplia la licencia de fabricación del Jimny hasta septiembre de 2009, el consejero andaluz concretó que "se sigue trabajando para analizar los efectos y se están viendo documentos al objeto de estudiar las posibilidades de previsiones industriales futuras".
De este lado, destacó el "gran esfuerzo" que los gobiernos central y autonómico están desarrollando para lograr una solución a este conflicto que pasa por la "reindustrialización de la zona", hecho por el que ambas administraciones están luchando "desde el primer momento".
Tras subrayar que "se dará una respuesta" a la parte social de la empresa, es decir, los trabajadores de la planta, puesto que "ellos son los que sufren las consecuencias del cierre", consideró "preciso" acometer conversaciones con diferentes empresas para que se instalen en la Bahía y, por tanto, "puedan servir de amortiguador" a esta situación.
Delphi Automotive Systems España informó el pasado 22 de febrero a los representantes laborales de su planta en Puerto Real que, después de un "exhaustivo" análisis de la situación financiera, legal y de negocio de esta factoría y "tras intentar encontrar otras alternativas", se ve "obligada" a cerrar la fábrica.
Según informó la propia empresa a través de un comunicado, la planta de Cádiz ha incurrido en pérdidas operativas significativas durante los últimos cinco años por un importe total de 150 millones de euros, además de sufrir "altos costes" y ser "incapaz" de atraer nuevos contratos de negocios "de manera competitiva".
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