Actualizado 04/02/2009 19:09

Economía/Motor.- Más de medio millar de trabajadores de Renault marchan hacia Valladolid para pedir más carga de trabajo

VALLADOLID, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -

Más de medio millar de trabajadores de las factorías vallisoletanas de Renault protagonizó hoy una marcha reivindicativa de cerca de cuatro kilómetros por la carretera de Madrid (N-601) en dirección a la capital vallisoletana con el objetivo de pedir más carga de trabajo en las fábricas de la multinacional francesa.

La manifestación, respaldada por todos los sindicatos, partió sobre las 14.20 horas de las factorías de carrocería-montaje y motores, centros ubicados en la N-601, para dirigirse hasta el actual edificio del Servicio Regional de Empleo (Ecyl), situado en la avenida de Madrid, donde antiguamente estaba la factoría de Montaje 1 de Renault.

El grupo de trabajadores, sobre el que sólo llovió al final del recorrido aunque tuvo que soportar fuertes vientos, iba precedido por un grupo que portaba una pancarta en la que se podía leer 'Comité de Empresa Renault-Valladolid, garantizar con carga de trabajo el futuro de Renault-Valladolid'.

La manifestación, a la que escoltaron cuatro furgonetas de la Unidad de Intervención Policial (UIP) de la Policía Nacional, tomaron la carretera de Madrid en dirección a la capital vallisoletana, lo que impidió el tránsito de vehículos en ambas direcciones, tanto de entrada a la ciudad como de salida hacia Laguna de Duero.

En su recorrido, los manifestantes, que tiraron sonoros petardos, fueron gritando consignas como "Renault, escucha, estamos en la lucha"; "la regulación para Carlos Goshn", "vaya tongo la fábrica del rombo" o "Castilla y León necesita la Renault".

La protesta, de unos cuatro kilómetros, tuvo varias paradas en los cruces con la Avenida de Zamora o Ronda Interior Sur, donde un reducido grupo más de trabajadores se sumó a la manifestación.

La movilización supuso importantes problemas de tráfico con algunos conductores que mostraron su enfado como el de una furgoneta que adelantó a la manifestación por la cuneta, por fuera de la calzada, cuyo conductor fue identificado por la Policía Nacional y fue increpado por los trabajadores, que le llamaron "esquirol".

Mientras gritaban "vamos de culo con esta dirección" o "más trabajo fijo, menos crucifijos", los empleados de Renault emplearon más de una hora y media en llegar al edificio del Ecyl, donde permanecieron unos minutos y advirtieron de que era la primera acción de protesta a la que seguirán más y pidieron a Junta, Administración central y Renault que "vayan tomando nota" porque se movilizarán mientras no se garantice el futuro en Renault Valladolid.

Finalmente, alrededor de las 16.00 horas terminó la manifestación en la que no hubo incidentes, excepto el que protagonizaron dos trabajadores de sindicatos diferentes ante la sede del Ecyl, que estuvieron a punto de enzarzarse en una pelea que evitaron sus compañeros y efectivos de la Policía Nacional.

UNIÓN SINDICAL.

Durante el acto de protesta, el secretario de Comunicación de la Sección Sindical de UGT en Renault España, Alejandro Durán, recordó que por unanimidad el Comité de Empresa decidió esta movilización para hacer saber "a la ciudadanía y a los políticos, locales, regionales y nacionales" que los trabajadores de Renault no se van a estar "quietos", que seguirán reivindicando carga de trabajo para la planta de Carrocerías-Montaje, como harán en París el día 12 al presidente del Grupo Renault, Carlos Goshn.

El representante de UGT mostró la "gran preocupación" no sólo los trabajadores de Renault y la carga de trabajo, sino también de las empresas auxiliares, ya que muchas ya están proponiendo expedientes extintivos directamente.

"Lo único que queremos es trabajar, lo que tenemos son nuestras manos y nuestro esfuerzo, tenemos capacidad y somos los mejores en calidad, por lo que pedimos a la empresa que de respuesta a la reivindicación", dijo.

Por su parte, Javier Pacios, responsable de la sección sindical de Comisiones Obreras en Acciona, empresa subcontratada por Renault para la limpieza de las factorías, indicó que esta situación "afecta a todos", pero con "más crueldad" a las empresas auxiliares que trabajan para la marca del rombo.

En este sentido, afirmó que están "aprovechando la coyuntura" para presentar expedientes "inflados y desproporcionados" para desprenderse de puestos de trabajo. "Nos sentimos engañados, decepcionados, por las administraciones, por dejar a las empresas al soslayo de expedientes que suponen una sangría". Además, recordó que el pasado año Acciona contaba con unos 400 trabajadores para las labores que realiza en Renault y ahora se ha reducido su número a casi la mitad, unos 220.

Por su parte, el responsable de Acción Sindical de Comisiones en el Comité Intercentros de Renault España, Agustín Dorado, reclamó más atención de las administraciones para que vigilen los expedientes que se presentan en lugar de conceder tantas subvenciones y recordó que su petición se centra en más carga de trabajo mediante un vehículo convencional, ya que el coche eléctrico llegaría en 2011 y no sería una solución para las factorías vallisoletanas.

En la misma línea se mostró el delegado general de la Confederación de Cuadros, José Ramón Martínez, quien se mostró "francamente preocupado" por el futuro de la factoría y afirmó que "se aguantará" si se supera la crisis, pero coincidió en la necesidad de un modelo convencional para fabricar en Valladolid antes de que llegara un hipotético coche eléctrico sobre el que no hay nada decidido.