VIGO, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
La factoría viguesa de PSA Peugeot Citroën reanudó a las 6.00 horas de hoy su actividad después de dos días de paro forzado por la falta de suministros tras el incendio en una fábrica de plásticos el pasado jueves en Allariz, Incalplás, que abastecía componentes a dos de sus principales proveedores, Peguform y Faurecia Ourense.
Según confirmó a Europa Press el responsable de comunicación de la fábrica, Pedro Hortas, tres de las cuatro líneas que estaban paradas han comenzado hoy de nuevo a producir. Se trata de las que fabrican los modelos C-4 Picasso, Peugeot Partner y Berlingo, mientras que la producción del Xsara Picasso sigue parada por falta de suministros.
Aunque al principio se barajó la posibilidad de acudir a la factoría de la firma en Brasil para conseguir las piezas que faltaban, esta opción se descartó debido a "complicaciones logísticas y de aduanas". Finalmente, se recurrió al 'stock' y a varios proveedores gallegos, que trabajan normalmente para PSA Peugeot Citroën, y que durante todo el fin de semana estuvieron fabricando las piezas necesarias para reanudar la actividad.
RECUPERACIÓN DE ÚTILES
Así, las tres líneas de producción indicadas volvieron al trabajo, mientras que la factoría y sus suministradores continúan, según explicó Hortas, trabajando en la "recuperación de útiles", es decir, en la reconstrucción de los moldes que permitían la elaboración de las piezas y que fueron dañados (algunos destruidos completamente) en el incendio del jueves en Incalplás.
Además, la dirección de la fábrica decidirá en las próximas horas si se puede continuar el trabajo como hasta ahora y cuándo se empezaría a producir de nuevo el Xsara Picasso, o si habrá que parar de nuevo la actividad en el turno de esta noche.
La mayor factoría de Galicia (con unos 9.000 empleados en la actualidad) trabaja, por motivos de logística y falta de espacio, con el sistema 'just in time', y reduce al mínimo posible sus 'stocks', de modo que un incidente como el ocurrido la pasada semana en alguno de sus proveedores, aunque sea de "segundo nivel", puede suponer la paralización de actividad por falta de suministros. En este caso, el paro de dos días supuso que dejaron de fabricarse más de mil vehículos.
