HANNOVER (ALEMANIA), 8 Sep. (EP/AP) -
El grupo Volkswagen, primer fabricante de automóviles de Europa, está dispuesto a ofrecer a los trabajadores de Alemania medidas que aseguren la estabilidad de sus empleos, a cambio de ampliar la jornada semanal, sin que ello suponga un incremento de los salarios.
El consorcio de Wolfsburg está inmerso en un programa de ajuste para recortar los costes de la marca Volkswagen, especialmente en lo relativo a la producción de modelos como el Golf, que registra elevados volúmenes de ventas pero aporta una escasa rentabilidad.
Por su parte, el sindicato IG Metall exige al grupo que garantice los niveles de producción en las cinco plantas de la zona occidental de Alemania que producen turismos, asegurando la continuidad de estas instalaciones y el mantenimiento de los puestos de trabajo.
Tras una reunión celebrada hoy entre las partes, el director de Recursos Humanos de Volkswagen, Horst Neumann, indicó que se han producido algunos avances, y agregó que ligar la productividad a los salarios, como ha propuesto el comité de empresa, puede ser una "parte importante de la solución".
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