MURCIA, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
La dificultad que están teniendo los ciudadanos y las pequeñas y medias empresas para obtener avales bancarios ha llevado a la Consejería de Economía y Hacienda a suprimirlos a la hora de solicitar el fraccionamiento o aplazamiento del pago de impuestos gestionados por la Agencia Regional de Recaudación, así como a incrementar el tope máximo que podía acogerse a esta medida, pasando de los 6.000 hasta los 30.000 euros.
La consejera de Economía y Hacienda, Inmaculada García, reconoció que la medida se adoptó "para dar respuesta a las demandas de los ciudadanos", pues se estaban registrando casos en los que la obtención del aval bancario para solicitar el fraccionamiento o aplazamiento para el pago de los tributos "estaba siendo muy dificultoso y, además, se había encarecido por la crisis de liquidez".
De esta forma, "vamos a facilitar ese pago y a abaratar los costes", al no ser ya necesario presentar aval bancario hasta los 30.000 euros, apuntó García, quien explicó que esta medida "afectará a más del 90 por ciento de los expedientes de aplazamiento y fraccionamiento de pago gestionados por la Agencia Regional de Recaudación".
"Entendemos que multiplicar por cinco la cantidad a partir de la cual son necesarias estas garantías facilitará considerablemente la satisfacción de los ciudadanos, ya que actualmente las entidades financieras están, debido a la situación de crisis, remisas a conceder esos avales", apostilló.
Esta iniciativa forma parte de un paquete de medidas "pionero en España" para facilitar el pago de los impuestos gestionados por la Agencia Regional de Recaudación, añadió García, quien recordó que "pagar impuestos, además de ser una obligación legalmente establecida, es un deber ciudadano, por cuanto si pagamos todos, pagamos menos". Por ello, "es necesario facilitar en todo lo posible, y de acuerdo con lo que nos permite la ley, que los ciudadanos cumplan con ese compromiso", agregó.
Así, en los 30 municipios que tienen acuerdo para la gestión de sus impuestos municipales a través de la agencia, se va a ampliar en un mes el período de pago voluntario, esto es, se pasará de contar con dos meses de plazo a disponer de tres, del Impuesto de Tracción Mecánica, más conocido como el 'sello del coche', que se pagará este año entre el 1 de marzo y el 30 de mayo, así como del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y del Impuesto de Actividades Económicas (IAE), que se abonarán del 1 de septiembre al 1 de diciembre.
Por su parte, la tercera medida tiene, según García, "carácter dinamizador" y supondrá que, aquellos contribuyentes que tengan domiciliado el pago en período voluntario de los tres anteriores impuestos --sello del coche, IBI e IAE--, podrán fraccionar el pago en tres plazos, sin intereses de demora, siempre que la cantidad a pagar sea superior a 100 euros. Esto permitirá escalonar el abono del impuesto, pagando primero el 20 por ciento del importe, después el 30 por ciento y, finalmente, el 50 por ciento restante.
APOYO A LOS AYUNTAMIENTOS.
García, quien estuvo acompañada en la rueda de prensa para presentar estas medidas por la directora de la Agencia Regional de Recaudación, Encarna López, recordó que el pasado mes de diciembre "ya dimos cuenta de las actuaciones destinadas a los ayuntamientos que eran, básicamente, la mejora de la información, mediante la actualización de las omisiones en el IBI y tributos locales relacionados con el territorio".
Pero también "el apoyo tecnológico a los municipios, mediante los servicios de tramitación electrónica de la Agencia Regional de Recaudación; el incremento en un 22 por ciento del número de ayuntamientos y organismos a los que la agencia presta colaboración en materia financiera y tributaria; y la reducción de los plazos de pago a los consistorios, hasta lograr realizarlos en la primera semana de mes", concluyó García.