MURCIA, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno autonómico ahorró 82,4 millones de euros en 2009 en gastos de personal, gastos corrientes en bienes y servicios y equipamientos administrativos, como resultado de la aplicación del Plan de Austeridad regional, puesto en marcha en septiembre de 2008 "como consecuencia de la crisis", según informó en rueda de prensa la consejera de Economía y Hacienda, Inmaculada García.
En concreto, los 82,4 millones de euros suponen un ahorro del 23 por ciento respecto al gasto de 2008. Según la consejera, este ahorro representa "un ejercicio de responsabilidad del Gobierno regional que ha contribuido en gran manera a reducir el déficit casi un punto con respecto al cierre del 2008".
La consejera indicó que "frente al cierre del 2008, en 2009 el Gobierno regional va a cerrar con un dos por ciento de déficit con respecto al Producto Interior Bruto (PIB), en contraposición al 2,87 por ciento con el que se cerró el año anterior", lo que consideró "un gran esfuerzo".
Desglosado por partidas, el Gobierno regional gastó 2,3 millones de euros menos en gastos de personal que en 2008, un capítulo que contempla las remuneraciones de altos cargos, personal de gabinete y contratación de personal de carácter temporal, lo que supone una disminución del 16,5 por ciento en esa partida.
Asimismo, el Gobierno regional disminuyó más de un cinco por ciento el capítulo de gastos de funcionamiento, un porcentaje que, en valores absolutos, se traduce en seis millones de euros en conceptos como el ahorro en reparaciones, material de oficina, prensa, atenciones protocolarias, publicidad, publicaciones y dietas.
El Ejecutivo también disminuyó las transferencias corrientes, es decir, lo que el Gobierno regional da a otras entidades para bienes y servicios, como las dotaciones para funcionamiento de fundaciones, consorcios públicos y entidades de la Comunidad Autónoma (excluidas el Servicio Murciano de Salud y las universidades públicas, que tienen un presupuesto independiente), con un ahorro de 25,2 millones de euros, lo que supuso el 22,4 por ciento.
García indicó que la cantidad más importante del ahorro del Plan "se debe a la reducción de las inversiones en edificios, mobiliario y equipamiento administrativo, incluido el informático, por un importe de 48 millones de euros".
García recordó que el Gobierno regional puso en marcha el Plan de Austeridad regional en septiembre de 2008, "cuando el Ejecutivo a diferencia de otros, ya reconocía la crisis y por eso nos pusimos a trabajar". Además, precisó que "se trata de unas medidas del Plan de Austeridad que la Unión Europea y los expertos en economía están pidiendo que tome ya el Gobierno central".
El Plan de Austeridad supuso la puesta en marcha de una serie de medidas que se iniciaron en 2008 y que afectaron a tres bloques de gastos fundamentales, como el gasto de personal, el gasto corriente en bienes y servicios, como medidas tendentes a la racionalización de la utilización de los recursos destinados al funcionamiento de los servicios, el ahorro energético, la reducción de suscripciones, en comunicaciones, en publicidad, reuniones y estudios.
Asimismo, abarcaron la reducción de subvenciones en el funcionamiento de entidades del sector público regional y todo lo que se entendía como sector público consolidado, como las entidades, entes y fundaciones que también tenían que aplicar este plan de austeridad, que no era solo aplicable a la administración regional.
Otras partidas que se vieron reducidas fueron las inversiones en equipamientos administrativos, como aumentar el periodo de renovación de los equipos informáticos, la implantación de subastas de contratación para acceder y comprarlas mucho más barato, y la no renovación a corto plazo de mobiliario y equipos informáticos de dependencias administrativas.
PREVISIONES 2010.
En cuanto a las previsiones para el año 2010, García avanzó que el Gobierno regional "continuará con la austeridad en el gasto, con la prioridad de las políticas destinadas a la generación y mantenimiento del empleo y las empresas, porque además, es la política necesaria para reactivar al economía y generar empleo, por lo tanto, para superar la crisis", opinó.
Así pues, las previsiones del Gobierno regional son ahorrar otros 50 millones de euros en 2010, "teniendo en cuenta que el Presupuesto de 2010 reduce por primera vez las partidas, mientras que en 2009 creció más de un cinco por ciento", según la consejera, quien precisó que estos recortes se aplicarán de nuevo en el funcionamiento de la administración y se derivarán de la aplicación de las nuevas tecnologías.
No obstante, la consejera advirtió que este ahorro de 50 millones de euros "no contemplan el ahorro de 20 millones de euros con la suspensión parcial de acuerdos y reducción de retribuciones salariales negociadas con los sindicatos de la Administración regional, que no están incluidos en el presupuesto de 2010". Así pues, el ahorro total ascendería a 70 millones de euros
PLAN DE AUSTERIDAD NACIONAL
A diferencia del Gobierno regional, García dijo que el Gobierno de España "todavía no ha adoptado ninguna medida, ni en el 2008, ni en el 2009 y parece que ahora lo va a adoptar en 2010, pero de una forma totalmente improvisada, sin planificar y generando una incertidumbre importante porque cambia la toma de decisiones de un día para otro".
La consejera recordó que el Ministerio de Economía "reenvió el jueves pasado un Plan de Austeridad aprobado por el Gobierno en Consejo de Ministros y que afecta la reducción de las Comunidades Autónomas". Así, aunque García indicó que "hay que desmenuzar" este documento, señaló que se trata de un Plan "un poco ambiguo y genérico y con unas formas que no son las más adecuadas".
En concreto, el documento "aprueba un Plan de Austeridad para las comunidades autónomas, que es muy extensivo en gastos de personal, como la renovación de cada diez jubilados solo se reponga uno, que no se contrate ningún interino, y pide congelaciones salariales y que se creen grupos de trabajo en el seno de política fiscal y financiera para racionalizar la dependencia y la sanidad".
Además, "pide grupos de trabajo para informar trimestralmente sobre los cobros y pagos a clientes y proveedores por las administraciones públicas". "El objetivo último es conseguir un déficit del tres por ciento en 2013, pero claro, el documento impone estas medidas a las comunidades, pero habría que empezar a ver las medidas que se aplica el Gobierno de España", criticó.
García afirmó que el incumplimiento de estas medidas comportará sanciones, pero reivindicó "el mismo trato para todas las comunidades autónomas, y que se tenga en cuenta una situación inicial de partida, ya que no es lo mismo la Región de Murcia, que es de las que menos déficit y deuda tiene".
No obstante, señaló que "lo que sí que es importante es que en ese documento se analiza expresamente el cierre a 2009 del déficit del consolidado español, en el que están recogidos el Gobierno de España, las comunidades autónomas y la administración local, y se estableció en un 11,4 por ciento de déficit, del que el 9,5 por ciento corresponde a administración regional, y el 2,2 por ciento a las comunidades autónomas.
"Esta es la realidad y es falso lo que se dice que el déficit corresponde a las Comunidades autónomas, espero que el Gobierno se centre y que de una vez por todas presente medidas estructurales de estabilidad y austeridad en el gasto público, porque son las políticas que precisa España para salir de la crisis", concluyó.