MADRID, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
El defensor José Luis Laso, destacó esta mañana en relación a Abdelilah El Fadual El Akil, que ser amigo de un terrorista no significa convertirse también en terrorista y destacó que todos los testigos que han acudido a la vista oral han coincidido en sus declaraciones sobre que su cliente nunca ha sido un integrista.
El Fadual El Akil es, en opinión de la Fiscalía, un estrecho colaborador de Jamal Ahmidan, alias "El Chino" --que se suicidó el 3 de abril en la vivienda de Leganés-- e intervino en las labores de acondicionamiento de la finca de Morata de Tajuña donde se almacenaron los explosivos utilizados en los atentados. Envió a una persona de su confianza para ayudar en las obras de reforma de la casa y visitó la finca en alguna ocasión en las semanas previas al atentado. En sus estancias coincidió con el núcleo de la célula encargada de ejecutar la masacre.
Además, facilitó documentación falsa a Ahmidan y le ayudó transportando desde Ceuta el coche que éste utilizó para traer los explosivos desde Asturias a Madrid. Colaboró además en la financiación de la célula a través del tráfico de drogas. Está acusado del delito de pertenencia a organización terrorista para el que la fiscal Olga Sánchez solicita un total de 12 años de prisión.
Laso solicitó, además, que se invalide la orden de entrada y registro al domicilio de su cliente y consideró que la detención de El Fadual, que fue transportado a Madrid en helicóptero desde Ceuta donde residía entonces, no estuvo sujeta a legalidad ya que se falsearon las diligencias policiales.
VISIONADO DE VIDEOS YIHADISTAS
El abogado destacó que durante su declaración El Fadual admitió que estando en compañía de dos de los suicidas de Leganés, los hermanos Mohamed y Rachid Oulad Akcha, vió en una ocasión una imagen de Bin Laden en un video que estaban reproduciendo en su domicilio. Al verlo, se asustó y se marchó de la casa, destacó el letrado.
En su opinión, el hecho de que el Ministerio Público tome este dato como una de las pruebas de pertenencia de su cliente a organización terrorista resulta desproporcionado y es similar a decir que la fiscal Olga Sánchez mantuvo reuniones con José Emilio Suárez Trashorras. "Estas reuniones eran en el despacho del juez instructor pero, sacadas de contexto, parecen otra cosa", explicó.
Destacó que su defendido no tiene antecentes por robo de vehículo indicio que contrata con la opinión de Fiscalía de que colaboraba con la célula falicitando vehículos sustraidos.
En cuanto a un coche Golf propiedad de Jamal Ahmidan y que pasó a ser de su cliente, Laso señaló que el intercambio se realizó siguiendo todos los trámites establecidos y destacó que la presencia de restos de explosivos en la alfombrilla del maletero no tiene relación alguna con su patrocinado ya que si hubiera sabido de su presencia "lo hubiera escondido".
Puso también de manifiesto que se presentó de forma voluntaria en la comisaría de Ceuta en compañía de su mujer al conocer que la Policía le estaba buscando. "Se presume su pertenencia a organización sin concretar en qué hechos de pertenencia ha participado", destacó.
Concluyó señalando que tiene la convicción de que de no haber fallecido los siete de Leganés, de no haberse producido la fuga de otros miembros y la identificación de los perfiles genéticos de varios acusados su patrocinado "no hubiera sido siquiera procesado".
