11-M-Juez que investiga a Sánchez Manzano pide a la Audiencia que le envíe el vídeo de las 450 horas que duró el juicio

Recurso De La Estación De Atocha Con Un Ramo Por El 11-M
REUTERS/SUSANA VERA
Actualizado: martes, 31 mayo 2011 20:57

MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -

La titular del Juzgado de Instrucción número 43 de Madrid, Coro Cillán, ha solicitado a la Audiencia Nacional que le remita una copia de la grabación del juicio celebrado entre febrero y julio de 2007 por los atentados del 11 de marzo de 2004, en el marco de su investigación sobre la actuación del ex jefe de los Tedax, Juan Jesús Sánchez Manzano.

La magistrada ha dictado una providencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, en la que reclama a la Sección Segunda de la Sala de lo Penal que le remita testimonio del acta de la vista oral y, en su caso, copia de la grabación en CD.

El juicio por el atentado, en el que murieron 191 personas y más de 1.500 resultaron heridas, se prolongó durante cuatro meses y medio. A lo largo de las 450 horas que duró la vista, fueron juzgados 29 acusados y cerca de 650 testigos fueron llamados a declarar.

El Juzgado de Madrid también ha solicitado que se le envíe la sentencia que dictó el tribunal, presidido por el magistrado Javier Gómez Bermúdez, por el mayor atentado terrorista ocurrido en Europa.

Esta diligencia se produce después de que la magistrada dictara la pasada semana un auto en el que rechaza archivar la causa abierta contra el comisario Sánchez Manzano y una perito de los Tedax por los delitos de encubrimiento, falso testimonio y omisión del deber de perseguir delitos.

La magistrada abrió este procedimiento a raíz de la querella interpuesta por la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M contra Sánchez Manzano por los delitos de encubrimiento, falso testimonio y omisión del deber de perseguir delitos. En la causa también están personadas la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), el Sindicato Unificado de Policía (SUP) y la Unión de Oficiales de la Guardia Civil (UO).

Sánchez Manzano fue el máximo responsable de los agentes encargados de la desactivación de las bombas de los atentados de Madrid y el que se hizo cargo de las muestras de los explosivos. Según la querella, su actuación dificultó conocer la naturaleza de las bombas y, por lo tanto, la autoría exacta de los terroristas.