El Harrak está condenado a 12 años de cárcel por los atentados del 11 de marzo de 2004
MADRID, 21 Nov. (EUROPA PRESS) -
El excomisario jefe de los Tedax Juan Jesús Sánchez Manzano ha solicitado a la Audiencia Provincial de Madrid que desestime la personación de Saed El Harrak, uno de los condenados por los atentados del 11-M, en la causa en la que se investiga la posible "destrucción" de restos recogidos en los focos de las explosiones.
La titular del Juzgado de Instrucción número 43 de Madrid, Coro Cillán, tenía previsto tomar este lunes declaración a un tedax y al que fuera comisario general de la Policía Científica durante los atentados de 2004, a petición de El Harrak, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.
La magistrada aceptó recientemente la personación del marroquí como acusación popular en la investigación abierta contra Manzano y una perito de su unidad por posibles delitos de encubrimiento, omisión del deber de perseguir delitos y falso testimonio. Sin embargo, ha aplazado su comparecencia hasta que la Audiencia de Madrid no resuelva sobre la petición del comisario.
El exjefe de los artificieros ha defendido que El Harrak no cumple con "los mínimos exigidos por la legislación española" para ejercer la acusación popular al carecer de nacionalidad española, "no gozar de la plenitud de derechos civiles" y no haber "aportado poder especial para pleitos" ni haber "ratificado la querella ante el juzgado".
"Jamás debió ser admitida su acusación popular. No tiene legitimación alguna", sostiene en el escrito remitido a la Audiencia Provincial, a la que recuerda que se trata de la "quinta" acción popular que la juez Coro Cillán admite con la aquiescencia del Ministerio Fiscal.
SU CASO NO GUARDA RELACIÓN CON ESTA CAUSA
Alude en su escrito a los artículos 101 y 102 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que establecen que todos los ciudadanos españoles en posesión de sus derechos civiles pueden ejercer la acción popular.
En este caso concreto, recuerda que el Tribunal Supremo confirmó la condena de la Sección Segunda de lo Penal de la Audiencia Nacional en la que se condenaba a El Harrak a 12 años de cárcel por pertenencia a organización terrorista y se le privaba del derecho a ejercer un empleo o cargo público.
Además, refuta los argumentos esgrimidos por el terrorista para personarse en el procedimiento y afirma que "ninguna" prueba que condujo a su condena "tiene que ver con los explosivos, la mochila de Vallecas o la recogida de muestras".
GUARDABA EL TESTAMENTO DE UN SUICIDA DE LEGANÉS
La Audiencia Nacional consideró probado que Saed el Harrak era miembro de la célula islamista que se suicidó en Leganés el 3 de abril de 2004. Entre las pruebas que llevaron al tribunal a esta conclusión se encontraba el "comprometedor contenido" de una carta de despedida que le dejó uno de los suicidas.
En este testamento, escrito en árabe, su autor Adennabi Kounjaa reprochaba a su mujer, sus padres y sus suegros que "ninguno hubiera tenido el mérito" de animarle para unirse "al camino de la yihad", al tiempo que emplazaba a sus hijas a seguir los pasos de los muyahidines. "Vuestro padre siempre ha pensado en el yihad. Los demás querían intimidarme con el sufrimiento y la cárcel", decía.
La Audiencia Nacional y el Tribunal Supremo recordaron además que El Harrek recibió más de 77 llamadas telefónicas procedentes de varios autores de la masacre en los días previos a los atentados.
Con Kounjaa y con Mohamed Oulad Akcha --ambos muertos en Leganés-- se citó en marzo de 2004 en la zona de Mocejón, en Toledo, en la que se encontró días más tarde un artefacto explosivo en las vías del AVE.
Según la querella interpuesta por la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M, la actuación de Sánchez Manzano dificultó conocer la naturaleza de las bombas y, por lo tanto, la autoría exacta del atentado. En esta causa también están personadas la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), el Sindicato Unificado de Policía (SUP) y la Unión de Oficiales de la Guardia Civil (UO).
