BARCELONA, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
CiU quiere que el Parlament de Cataluña obligue políticamente al presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, a disolver la Cámara antes del inicio del próximo periodo de sesiones el 1 de septiembre y convocar elecciones anticipadas. La federación nacionalista ha presentado una moción que se debatirá en el próximo pleno el día 22 y que se someterá a votación de todos los grupos. El resultado de la votación se prevé incierto ya que en la última comparecencia de Maragall en el Parlament todos los grupos menos el PSC urgieron al presidente a convocar comicios lo antes posible lo que condujo al presidente a anunciar que haría pública la fecha tras el verano.
La moción presentada por CiU a la que ha tenido acceso Europa Press señala que el Parlament de Cataluña, "ante la pérdida de apoyo de la mayoría parlamentaria del Gobierno de la Generalitat, y teniendo en cuenta la permanente inestabilidad política del país, insta al presidente de la Generalitat para que, haciendo uso de sus atribuciones, disuelva el Parlament antes del inicio del próximo periodo de sesiones y proceda a la convocatoria de elecciones anticipadas".
Asimismo, la federación nacionalista aboga por someter a debate y votación del Parlament hasta once planes y programas del Gobierno de la Generalitat con el objetivo de "conformar el consenso político necesario para impulsar aquellas decisiones necesarias para garantizar la gobernabilidad del país. Los proyectos que el Ejecutivo debería trasladar al Parlament son el de la Red Natura 2000, el plan territorial sectorial de equipamientos comerciales, el plan de infraestructuras de transporte, los planes territoriales parciales, los planes directores territoriales y los urbanísticos, el plan de saneamientos de aguas residuales urbanas e industriales, el plan de la nieve, el plan general de política forestal y el plan de desarrollo rural 2007-2013.
CONTROLAR LA SELECCIÓN DE PERSONAL Y LOS CONCURSOS DE OBRA PÚBLICA.
Además, la moción exige al Gobierno de la Generalitat que traslade al Parlament, con caracter previo a su aprobación, los proyectos de decreto o propuestas que afecten los procesos selectivos de personal, los acuerdos relativos a procesos de información pública y licitación de las grandes infraestructuras, los acuerdos en materia de peajes, la definición de las líneas estratégicas de actuación de la Feria Internacional del Libro de Frankfurt y hasta la venta de la participación de la Generalitat en Al-pi.
También quieren someter a control del Parlament, los convenios de traspasos de competencias con las diputaciones, el reglamento de apuestas por internet, el traspaso de las oficinas de Bienestar y Familia a la que la Cámara ya se opuso en el último pleno, y el despliegue de los gobiernos territoriales de sanidad y de los consorcios territoriales del Servei d'Ocupació de Catalunya (SOC).
Finalmente, la moción pretende que el Parlament repruebe al conseller de Cultura, Ferran Mascarell, por considerar que ha manifestado "de forma explícita su voluntad de no cumplir la moción aprobada por unanimidad en la Cámara catalana sobre las obras de arte de la Franja que se encuentran en el Museo Diocesano de Lleida y que impediría su traslado hasta que se aclare el conflicto sobre su propiedad.
